El Corredor Ferroviario Bioceánico Noa-Centro es uno de los proyectos claves para la activación de la economía en la región, y países como Chile y sur de Brasil principalmente.
El proyecto prevé dos centros logísticos o puertos de transferencias de carga, uno ubicado en el departamento Chamical, en La Rioja, y el otro en la localidad de Recreo, en La Paz, Catamarca, que se convertirán en nodos de concentración, transferencia y distribución de cargas.
En este sentido, ya se firmó un convenio entre Catamarca y el Ministerio de Transporte de la Nación para el financiamiento por 300 millones del Puerto de Transferencia Multimodal de Recreo, en el departamento La Paz. Allí funcionará un puerto seco para el redireccionamiento rápido de las operaciones de carga.
Recreo se encuentra en un punto geográfico clave: cuatro capitales del noroeste se encuentran a menos de 300 kilómetros del lugar: San Fernando del Valle de Catamarca, 206 kilómetros; Santiago del Estero, 215 kilómetros; La Rioja, 220 kilómetros; y Tucumán, a 290 kilómetros. Esto la convierte en un lugar propicio para concentrar todos los productos exportados por estas provincias.
Este será un punto clave para el Corredor Bioceánico, convirtiendo a la red ferroviaria del Belgrano Cargas en un canal de exportación a través de los puertos de la Tercera Región de Atacama. Esta conectividad también atrae el interés de los países limítrofes del norte argentino.
Catamarca/12 tuvo acceso a los proyectos planteados dentro del Plan de Desarrollo Federal que viene activando el gobierno nacional junto a las 10 provincias del Norte Grande.
Puerto de Transferencia Recreo
Un puerto de transferencia multimodal es una terminal de mercancía situada en el interior de un país o región económica que conecta, a través de la red ferroviaria, con el puerto marítimo de origen o destino de los tráficos tratados. De ahí la denominación de “Puerto Seco”, al manipular tráficos portuarios en una zona interior.
El de Recreo será una plataforma intermodal, pues combinará el transporte ferroviario, el terrestre y el marítimo, constituyendo una importante cadena de medios de transporte que facilitará la canalización de los flujos de mercancía.
Estará ubicado sobre la ruta nacional 157, que une con el Paso de San Francisco, en dirección este oeste, 25 kilómetros al norte de la ruta nacional 60.
El predio donde será construido cuenta con una superficie de 32 hectáreas (5456,25 metros cuadrados), de las cuales 16 hectáreas cubrirán las instalaciones básicas de funcionamiento y el resto se destinará como área de reserva para futuras ampliaciones.
Control fronterizo Las Grutas
Para la construcción del complejo binacional de Las Grutas, en Tinogasta, ya se firmó otro convenio por 700 millones.
El complejo binacional denominado de Cabecera Única, en el que Argentina y Chile compartirán los edificios y las tareas de fiscalización, se posicionará en una fracción de un terreno de 6 hectáreas, y se construirá a ambas márgenes de la ruta nacional 60, ocupando unas 2 hectáreas.
Esta parcela, perteneciente al estado provincial de Catamarca, está a 4.000 metros sobre el nivel del mar, a 180 kilómetros de la localidad de Fiambalá y a 20 kilómetros de la frontera.
El complejo se conformará a partir de dos edificios principales: el Edificio de Control de Vehículos y Ómnibus y el Edificio de Fiscalización de Cargas, que estarán ubicados en un eje transversal a la ruta. Habrá, además, un tercer Edificio de Alojamiento de Funcionarios, Módulos de Servicios y Apoyo a los Edificios Principales, que contará con una capacidad para 64 funcionarios, entre argentinos y chilenos, 30 plazas destinadas a fuerzas de seguridad y 12 plazas para el personal de limpieza y mantenimiento.
Las características principales de los edificios serán los grandes espacios con mostradores destinados a la atención al público donde los administrativos de los organismos argentinos y chilenos realizarán los controles. Contarán además con oficinas para cada organismo, servicios sanitarios, kitchenette, sala de reunión, salas de máquinas, depósitos para decomisar mercadería y dependencias complementarias para pasajeros (sectores para información turística, sanitarios, sectores de enfermería y primeros auxilios).
El sector de Control de Cargas, ubicado al costado de la ruta nacional 60, en la margen Sur, se realizará en dos etapas. En la segunda etapa se proyecta la báscula para pesaje de camiones (de 50 m2), un sector destinado a derrames y cargas peligrosas (100 m2), y scanner (890 m2). También se prevé un estacionamiento con capacidad para 60 vehículos de gran porte, y que podrá ser duplicada a futuro. Según el proyecto, en la primera etapa se ejecutará el Edificio de Fiscalización de cargas cuya superficie es de 862 m2, con tres plataformas o dársenas elevadas para el control de los vehículos y de las cargas. Esta expansión o superficie semi-cubierta tendrá 1075 metros cuadrados.
La puesta en marcha del Corredor incluye la inversión en varios tramos de las vías ferroviarias hasta Recreo-Chumbicha, así como de los trazados Andalgalá-Mazán, Serrezuela-Mazán, Mazán-Tinogasta, Tinogasta-Paso San Francisco, entre otros.
Diferentes sectores, tanto públicos como privados, concuerdan en que el Corredor Bioceánico presenta grandes ventajas competitivas que incluyen la reducción de costos de fletes en un 30%; mayor capacidad de transporte, llegando al doble; disminución en tiempos de navegación de entre 12 y 15 días; puertos de mayor calado (tres veces más que los puertos de Buenos Aires y Rosario), lo que permite una mayor carga para los barcos (una diferencia de 400.000 toneladas con respecto a las 50.000 de puertos locales).
Del lado de Chile, también se prevé la construcción de un puerto de transferencia en Atacama. Las instalaciones permitirán la operación de embarcaciones de transporte a granel a través de la terminal de granos clase mundial con 30 metros de calado y porta contenedores a través de la terminal multiproposito con 19 metros de calado.
Será un complejo portuario de alta eficiencia operacional, ubicado en la Tercera Región de Chile, ubicado estratégicamente en relación con el paso fronterizo de San Francisco. El proyecto destaca las características naturales que permitirán mayor capacidad operacional en comparación con otros puertos de Argentina y de Chile, asegurando capacidad de carga para buques de hasta 400.000 toneladas.
Para el Comité de Integración ATACALAR, que lleva adelante las proyecciones, el Corredor Ferroviario Bioceánico "constituirá un sistema territorial estratégico, que permitirá la integración regional en distintos aspectos: económicos, políticos, sociales, culturales".