El gobierno de Salta busca usar tierras de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en el municipio de Cerrillos para hacer dos urbanizaciones y entregar un total de 2895 terrenos en el marco del Plan Mi Lote, lanzado en agosto del año pasado tras sucesivos asentamientos y tomas de tierras, como reacciones al déficit habitacional que tiene la provincia.
El gobernador Gustavo Sáenz quiere que la Nación transfiera a la provincia a título gratuito tierras de una matrícula total de 596 hectáreas de las más de 1300 hectáreas que tiene el INTA en Cerrillos para destinarlas a realizar urbanizaciones, aunque las dos propuestas de loteo por ahora presentadas comprenden solo 149 hectáreas.
La cesión de bienes del Estado argentino tiene que ser aprobada por el Congreso de la Nación. En este caso, ya hay un proyecto de ley con trámite parlamentario, en el tramo inicial, en comisiones, como puede verse aquí https://dequesetrata.com.ar/proyecto/camara-de-diputados/7063-D-2020-35440
Un dato llamativo es que el gobernador no recurrió, como podría esperarse, a legisladores de su propia provincia para la presentación de la iniciativa legislativa, sino que la hizo llegar a la Cámara de Diputados a través del diputado nacional por Buenos Aires Carlos Selva, que integra el interbloque del Frente de Todos, pero que originariamente es parte del espacio que lidera Sergio Massa.
“Transfiérase a título gratuito a la Provincia de Salta, el dominio de un inmueble propiedad del Estado Nacional –Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria- ubicado en el Departamento Cerrillos, matrícula dominial 6968, de superficie 596 hectáreas”, dicta el artículo primero del proyecto de ley presentado por Selva.
El artículo 2° determina que la transferencia es para que “la beneficiaria realice un programa de desarrollo urbano” en esas tierras. El artículo 4° indica que una vez sancionada esta iniciativa, el gobierno nacional tendrá 60 días para adoptar “las medidas pertinentes a los efectos de concluir los trámites necesarios para el otorgamiento de las respectivas escrituras traslativas de dominio”.
Por lo que pudo comprobar Salta/12, el gobierno provincial tampoco conversó esta iniciativa con las autoridades locales del INTA, directamente afectadas por el proyecto que impulsa. "Formalmente yo no tengo nada, tengo esa información a título informal, pero no se ha cursado ningún expediente, trámite o pedido al INTA, de opinión al menos", informó el director del Centro Regional Salta Jujuy (del que depende la EEA Cerrillos), José Minetti.
El diputado nacional por Salta Lucas Godoy (FdT), que se enteró del proyecto cuando lo vio en la Comisión de Legislación General, informó que se reunió con el director de la EEA Cerrillos del INTA, Bruno Baldi, quien también se anotició por vías extraoficiales y en ese encuentro pidió que al menos pudieran conversar para determinar qué tierras son más importantes para el INTA.
"Yo lo trasladé esto a la Comisión, hablé con el autor, le dije que me había puesto en contacto con la gente del INTA y que quieren participar de la discusión, que no rechazan, no están en desacuerdo, pero sí quieren tener intervención, lo que me parece sumamente lógico", por lo que los invitará a una reunión de las comisiones "para que expongan, para que lo dialoguemos", detalló el legislador.
Además el diputado remarcó que considera prioritario resolver el problema habitacional salteño, "pero en este caso puntual sería apropiado que sean los propios técnicos del INTA los que indiquen cuales son las tierras que pueden ceder para un loteo, sin que afecte la importante tarea de investigación que realizan".
De las 1300 hectáreas que tiene el organismo en Cerrillos, unas 800 sirven para agricultura. Y en el predio hay caminos, represas, edificios, galpones, invernaderos y laboratorios. Al tratarse de una estación experimental, es necesario contar con tierras para las prácticas que lleva adelante.
Tampoco se sabe si el gobierno de Salta se comunicó con la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE).
Mi Lote
En los fundamentos del proyecto de ley de Selva se indica taxativamente que la transferencia “tiene por objeto la realización a cargo de la provincia de Salta del Programa de Desarrollo Urbano ‘Mi Lote’”. También detalla que se hará una subdivisión de una "fracción remanente de 596 hectáreas en 2895 lotes con destino a desarrollo de infraestructura en servicios, habilitación de plazas, espacios públicos, unidades educacionales, sanitarias, asistenciales, culturales y deportivas”.
Y se sustenta la pretensión sobre estas tierras en “la existencia de numerosas familias salteñas que no tienen actualmente una vivienda y carecen de la posibilidad de acceder a ella con recursos propios”.
Ese proyecto de desarrollo urbano ya fue elaborado por el Instituto Provincial de Vivienda.
En la génesis del proyecto, el 3 de marzo el ministro de Infraestructura de Salta, Sergio Camacho, elevó al gobernador el “informe técnico” de la Unidad Ejecutora Provincial “Plan Mi Lote”, “relacionado a la afectación de las áreas necesarias para el Programa de Desarrollo Urbano denominado “Mi Lote”.
En ese informe se indica que la afectación “recaería sobre una porción de la superficie de mayor extensión de la Matrícula Catastral 6968, de propiedad del Estado Nacional”.
A su vez, Camacho había recibido el informe, “y documentación complementaria”, del secretario de Obras Públicas, Héctor Hugo de la Fuente. En ese informe se detalla que la urbanización se proyectó en dos lugares: la fracción A, donde se prevé dividir 870 lotes “en la zona de cruce de circunvalación sureste y ruta nacional 68”, una superficie de 41 hectáreas. Y la fracción B, “un total de 2025 lotes en la zona de Cerrillos –Ruta prov N° 21, camino a San Agustín”, de 106 hectáreas.
Entre ambas urbanizaciones se llega al total de 2895 lotes “siendo la afectación total de 147 has”. Pero como la transferencia se propone sobre una matrícula total de 596 hectáreas, por lo quedarían todavía a de remanente total en ese lote 449 hectáreas.
El Estado argentino compró estas tierras en 1959 para destinarlas a la EEA Cerrillos. El INTA fue fundado en 1956, es un organismo público descentralizado con autarquía operativa y financiera, que está en la órbita del Ministerio de Agricultura y Pesca de la Nación. Su objetivo es la innovación como motor del desarrollo nacional, integra el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación y en ese marco desarrolla capacidades para el sector agroindustrial.