Talleres e Independiente se repartieron un tiempo cada uno, pero el festejo final fue sólo de los cordobeses que se impusieron 3-1 este sábado por la tarde en el estadio Mario Alberto Kempes. Así, el equipo de Alexander "Cacique" Medina hace tres partidos que no pierde (2-1 a Boca y 1-1 con Godoy Cruz previamente) y sube en la Zona B, un punto por debajo de los dirigidos por Julio César "Emperador" Falcioni, que tienen 13 y hace tres que no ganan (0-1 con Vélez y 1-1 con Boca). En la próxima fecha, la T visita a Defensa y Justicia mientras que el Rojo irá nada menos que a Racing.


El choque se presentaba como uno que iba a decidirse en el mediocampo, dada la presencia de dos muy buenos volantes centrales como Federico Navarro por el dueño de casa y Lucas Romero por la visita. Y como desde el minuto cero Talleres se hizo de la pelota, el que mejor la pasó fue el santafesino de medias bajas, quien manejó los hilos de la T durante todo el primer tiempo.

Fue verdaderamente apabullante lo de los cordobeses en los 45 iniciales con una intensidad que no le permitió a Independiente salir con comodidad de su campo de juego. Presión asfixiante y ataque por todos los flancos con la subida constante de sus laterales Augusto Schott y Angelo Martino, de 21 y 22 años respectivamente y prometedor futuro. 

El uruguayo Sebastián Sosa tuvo que erigirse nuevamente como estandarte rojo para sostener la valla de los suyos, pero sobre el final de la primera parte, ya no pudo hacer nada ante errores de sus compañeros y virtudes rivales. A los 45, Fabricio Bustos despejó un centro que iba largo al medio y Carlos Auzqui la calzó de volea para poner el merecido 1-0. En la jugada casi siguiente, Franco Fragapane se armó una genialidad dejando varios en el camino y armando una pared con el propio Auzqui para, luego de una atajada de Sosa, tomar el rebote ante la siesta del fondo rojo y poner el 2-0.

Tremendo cachetazo para los de Falcioni de cara al entretiempo. Sin embargo, la buena tarea cordobesa se fue apagando en la segunda parte y los cambios del Emperador hicieron lo suyo para que la visita sueñe con el empate. De la mano de Alan Velasco y Andrés Roa, Independiente encontró fútbol y se acercó al arco de Guido Herrera. A los 74, Sebastián Palacios cumplió con la "Ley del Ex" y puso el descuento luego de un avance del lateral veinteañero Thomas Ortega, otro ingresado de buen partido.


Ante la ausencia de Silvio Romero por coronavirus, entre Nicolás Messiniti y Jonathan Herrera se repartieron el puesto de centrodelantero rojo. Y fue el segundo el que tuvo mejores chances, cuando le tocó ingresar en la última media hora, pero primero un cabezazo dio en el palo y luego dominó mal una inmejorable cesión dentro del área y definió ante el cuerpo del defensor que se interponía entre él y el empate.

A Talleres se le había complicado la historia con la expulsión de Martino a los 69, pero Independiente le facilitó el cierre con un doble error en una escapada del uruguayo Michael Santos, beneficiado por una mala marca de Velasco y una infracción dentro del área de Bustos. El colombiano Diego Valoyes cambió el penal por gol a pesar de todas las tretas posibles que le pusieron -Juan Insaurralde que se puso a dañar el tiro penal con sus tapones y el uruguayo Sosa que le dijo de todo- y sentenció el 3-1 para que festejen los cordobeses.