En una jornada en la que en la Ciudad de Buenos Aires hubo un récord de contagios de coronavirus --2428 confirmados en 24 horas de un total nacional de 13.667 casos--, los hospitales porteños extendieron sus horarios para hacer hisopados y las filas para testeos ocuparon varias cuadras. En Casa Rosada se reunieron representantes de los gobiernos nacional, de Provincia de Buenos Aires y de la CABA para acordar nuevas acciones ante la "preocupante situación sanitaria", según comentaron. Tras el encuentro no anunciaron medidas, dado que hubo un cuarto intermedio hasta hoy a las 14, cuando los jefes de gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, bonaerense, Carlos Bianco, y porteño, Felipe Miguel, junto a los ministros de Salud de los tres distritos, se volverán a reunir para terminar de analizar y comunicar las decisiones. Antes, por la mañana, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, dará una conferencia de prensa en la que se espera que comente algunos de los temas tratados y las posibles medidas. Desde el Gobierno adelantaron que los anuncios importantes se realizarían antes del viernes, día en que vence el DNU que firmó el Presidente antes de Semana Santa.
"Todos coincidieron en que la segunda ola ya es un hecho y que hay que tomar medidas de prevención", aseguraron fuentes del Gobierno a este diario. En ese sentido, detallaron que "tanto CABA como Provincia de Buenos Aires se llevaron propuestas de Nación y traerán las suyas". Los ministros de Salud de todas las provincias, nucleados en el Consejo Federal de Salud, también coincidieron en que la segunda ola ya llegó.
Según informaron a Página/12 fuentes del gobierno porteño, en el encuentro de ayer evaluaron la situación actual que "preocupa a todos" y agregaron que "seguiremos dialogando para encontrar estrategias comunes tratando de cerrar un acuerdo sobre las medidas que se tomarán en el AMBA". Desde Provincia, en tanto, confirmaron que "este martes (por hoy) terminaremos de analizar algunos indicadores con mayor precisión para tener una propuesta y una línea de acción clara".
Uno de los temas que más preocupan a los funcionarios de los tres distritos son las reuniones sociales. En esa línea, desde Ciudad afirmaron a este diario que en la reunión "analizamos la nocturnidad, los encuentros sociales y familiares, que son hoy el gran punto donde hay que trabajar fuerte".
El poco control sobre fiestas y reuniones es uno de los puntos más alarmantes ante el aumento de casos. Por ello en la reunión de ayer, además de conversar sobre posibles restricciones en el transporte público, también se evaluó recortar los horarios para la circulación de personas. Una opción sería que las restricciones se adelanten de las 2 de la madrugada a las 11 de la noche. El conflicto, en ese caso, estaría centrado en las actividades gastronómicas que verían reducido el horario de atención al público.
Las discusiones acerca de restringir o no más actividades no solo se dan entre los distintos gobiernos, sino también al interior de los mismos. Mientras los sanitaristas y funcionarios de las carteras de Salud insisten en que hay que limitar actividades, desde otros sectores de la gestión son más bien reticentes por el impacto en la actividad económica y comercial.
Colapso
La situación sanitaria en la Ciudad está al borde del colapso. Eso quedó en evidencia no solo por el creciente número de contagios, sino también por un comunicado que el gobierno porteño envió a sus hospitales públicos informando que ahora la prioridad serán solo los casos vinculados al covid-19. Ayer el Hospital Argerich extendió el horario para realizar hisopados hasta las 12 de la noche porque las colas superaban las cuatro cuadras. Desde el hospital informaron que es muy alto el número de casos positivos y que la ocupación de las camas ya se encuentra en un porcentaje elevado.
Con respecto al aumento de contagios de las últimas horas, funcionarios porteños comentaron a Página/12 que fue tan alto porque "hubo recuperación de casos del fin de semana largo, por ende no es muy representativo, pero de todas maneras es un número importante".
Sobre las restricciones que anunciarán en estos días, desde Nación subrayaron que hay dos puntos que todos los distritos están de acuerdo en no cerrar: la presencialidad escolar y las actividades que están vinculadas con la reactivación económica, como la industria y el comercio. "Todos entienden que allí las restricciones deben ser las menores posibles mientras no haya evidencia científica contraria", puntualizaron.
Desde Presidencia informaron que "el clima de la reunión fue excelente", pero no se llegaron a acuerdos y tampoco se confirmó si habrá un diálogo tripartito entre Alberto Fernández, el gobernador Axel Kicillof y el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para terminar de definir las medidas. Un encuentro presencial por el momento está descartado, dado que el Presidente se recupera tras dar positivo de covid. Según comentaron desde su entorno, "el Presidente está en aislamiento completamente solo y estamos viendo cómo se resuelven ciertas cuestiones organizativas. Por ejemplo, la traducción para la reunión con el presidente Vladimir Putin se hizo con un traductor en línea que pusieron desde la Federación Rusa", explicaron.
El clima general en Balcarce 50 sigue siendo de mucha preocupación. Están esperando con alarma los casos que puede haber luego del movimiento turístico por el pasado fin de semana largo: los datos oficiales sobre su impacto en la curva de contagios se sabrán recién la semana que viene. "Estamos confirmando que la segunda ola es un hecho. En eso coincidieron todos", dijeron desde el Ejecutivo. En ese sentido, volvieron a remarcar que el objetivo sigue siendo avanzar con la campaña de vacunación y cuidar la presencialidad escolar y las actividades vinculadas con la reactivación económica, pero que si el escenario cambia, esto también se tendrá que revisar.