Las restricciones anunciadas por el presidente Alberto Fernández para atenuar el nivel de contagios de coronavirus generaron el reclamo de choferes de larga y media distancia. Desde el lunes se encuentran cortando la avenida 9 de julio y San Juan, y se replicaban las protestas en distintos puntos del país como Mendoza, Santa Fe, San Luis, Córdoba y Neuquén.
El reclamo está encabezado por pequeñas y medianas empresas de turismo que viven de viajes grupales, que fueron suspendidos momentáneamente por el alto índice de contagios que implica la segunda ola de la pandemia. Los dueños de ómnibus particulares reclaman que los reciba el Gobierno para que atienda la situación particular que están viviendo ante el corte de su fuente laboral y los problemas económicos que genera a sus familias.
"Nosotros estuvimos nueve meses sin trabajar. Cumplimos con todos lo que piden, tenemos micros grandes, para sesenta pasajeros y se trabaja con un máximo de 45. Estamos pidiendo que haya estaciones de testeo, que se tomen medidas", señaló uno de los manifestantes que se encuentra en el bajo la autopista, a la altura de la avenida San Juan.
Demandan una ayuda económica para la emergencia que genera la pandemia y sus fuentes de trabajo, como la suspensión de tasas que deben pagar quienes integran el rubro y que se extienda los años de antigüedad de los modelos de ómnibus que les exige la normativa legal para poder desempeñar su trabajo. Los empresarios solicitan una audiencia con el ministro de Turismo, Matías Lammens, para poder expresar sus demandas y necesidades ante la medida que prohíbe viajes de egresados, de jubilados, de estudio y de compras.
