30
por ciento apenas es la presencia de mujeres en puestos de decisión en las áreas de economía, defensa y seguridad, medios, sindicatos y educación. A lo largo de una década, el proceso hacia la equidad parece seguir estancado, confirma la cifra que surge del informe “Sexo y poder: ¿Quién manda en la Argentina? Participación de las mujeres en espacios de poder en 2020”, del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), que vuelve a constatar el magro posicionamiento registrado en su primer relevamiento de 2010. “El Poder Ejecutivo, tanto a nivel nacional como subnacional, tracciona los índices hacia abajo. Si comparamos la participación de mujeres en los puestos en 2010 y en 2020, el crecimiento de la presencia de mujeres es de sólo 3 puntos porcentuales (9,2 % vs 12,6 %)”, subraya uno de los capítulos del estudio dirigido por Natalia Gherardi, directora ejecutiva de ELA. “Si en cambio observamos los crecimientos de los otros dos poderes del Estado, tanto a nivel nacional como subnacional en esta última década, la diferencia se encuentra entre los 8 y 9 puntos porcentuales.” Incluso en los espacios donde la participación de las mujeres es masiva y está por encima del 50 %, como la educación, el derecho, las ciencias de la salud, “su acceso a puestos de más alta decisión en esas mismas áreas está lejos de ser paritario (en educación es del 14 %, en la Justicia federal y en la Corte Suprema de la Nación es del 20 % y en Salud es del 32 %) y ha mostrado un avance muy lento en la última década”.
