Parece imposible imaginar un mejor momento para el estreno de la nueva película de Zack Snyder: el impacto del lanzamiento del corte del director de Liga de la justicia, de cuatro horas de duración –algo inédito en el terreno del cine de superhéroes– todavía no se ha apagado y su nombre sigue ascendiendo en ciertos círculos cinéfilos no tradicionales hacia las cumbres del autorismo. El ejército de los muertos (Army of the Dead) tendrá un estreno reducido en salas de los Estados Unidos y otros mercados el próximo 14 de mayo, para desembarcar exactamente una semana después en la plataforma Netflix, una de sus compañías productoras, en todo el mundo. En un evento publicitario de alcance global se presentó este martes el tráiler oficial del largometraje, acompañado de una sesión de preguntas y respuestas en vivo con el realizador y un saludo grabado de al menos una docena de los miembros del reparto, encabezado por Dave Bautista, Ana de la Reguera, Ella Purnell, Omari Hardwick y Matthias Schweighöfer, entre otros.
Snyder no es un recién llegado al cine de zombis: su ópera prima, El amanecer de los muertos (2004), una inteligente remake del clásico homónimo de George A. Romero, fue el primer paso de una carrera que lo llevaría luego a la relectura del cine épico con 300 (2007) y al ingreso a las películas con hombres y mujeres de calzas ajustadas y poderes especiales gracias a Watchmen: Los Vigilantes (2009), universo que prácticamente no abandonaría salvo honrosas excepciones. El avance de El ejército de los muertos señala un cambio de locación respecto de ese esfuerzo previo en las lides zombis (el shopping ha sido reemplazado ahora por un casino en Las Vegas), pero el propio realizador se encargó de señalar que no se trata de una secuela. Teniendo en cuenta que el género cinematográfico creado por Romero es hoy en día casi una franquicia en sí misma, la aclaración parece algo innecesaria, pero inevitable. Más allá del tono de horror inherente a las historias de muertos vivos, el “truco” narrativo incluye una cruza con la heist movie, la película de robos sofisticados.
Con fondo musical del clásico inoxidable de Kenny Rogers “The Gambler”, el tráiler muestra a un grupo heterogéneo de mercenarios amateurs preparando el golpe a un casino en una zona en cuarentena luego del apocalipsis, pero lo que encuentran finalmente en el lugar resulta mucho más peligroso de lo esperado. El derruido edificio es un auténtico nido de muertos vivitos y coleando, de inteligencia superior y enorme destreza física, punto de partida para una película “que contiene sangre y gore, pero que es también un relato de aventuras con un sentido del humor ligeramente autoconsciente”, en palabras del máximo responsable del film. La amenaza de una bomba nuclear sobre sus cabezas y las imágenes de un grupo de coristas en estado de putrefacción y hasta de un tigre zombi parecen darle la razón a Snyder. Luego de una pregunta realmente insólita por parte de uno de los participantes del evento (“¿Cree que en la vida real sobreviviría a un ataque zombi?”), el director de Sucker Punch: Mundo surreal y El hombre de acero aclaró que no habrá remontajes futuros de esta película, afirmando que “este es el corte del director”, antes de alabar la libertad con la cual la plataforma de streaming más poderosa del mundo lo dejó trabajar.
Más allá de ese derroche de flores verbales, Snyder también recordó las influencias e inspiraciones que lo llevaron a embarcarse en este proyecto, aunque, irónicamente, no hizo ninguna mención a George “Papá Zombi” Romero. “Las películas de muertos vivos pueden combinar muchos géneros diferentes y también incluir el comentario social. Hay muchos títulos que me han inspirado, además de los films de zombis en sí mismos, como Escape de Nueva York, Aliens y El enigma de otro mundo. Me interesaba jugar con las reglas del cine de los undead y divertirme con los lugares comunes de ese universo. Hubo una versión original del guion, que en un primer momento yo no iba a dirigir, pero volvimos a escribir desde cero y eso fue muy excitante y divertido. Estoy obsesionado con la idea del tono y con mantener al público en el borde del asiento”. Habrá que ver si esa máxima se aplica también para un proyecto que Snyder tiene debajo de la manga desde hace varios años: una nueva adaptación de la novela de Ayn Rand The Fountainhead, llevada magistralmente al cine en 1949 por King Vidor, con el papel protagónico de Gary Cooper. Por ahora no habrá arquitectos en lucha con el mundo, pero sí más muertos vivos… con una vuelta de tuerca.