Rusia anunció que expulsará a diez diplomáticos estadounidenses además de otras medidas en respuesta a las sanciones anunciadas ayer desde EE.UU. “El presidente ruso ha aprobado estas medidas en respuesta a los actos absolutamente inamistosos y gratuitos anunciados por Washington contra Rusia, nuestros ciudadanos, personas físicas y jurídicas, y nuestro sistema financiero", declaró Serguei Lavrov, el ministro de Exteriores ruso, en una rueda de prensa.
La respuesta del Kremlin viene un día después de que la administración de Joe Biden sorprendiera con la expulsión de diez diplomáticos rusos. El demócrata también amplió las restricciones a los bancos estadounidenses que negocian la deuda que emite el Gobierno ruso.
Según el ministro Lavrov, la expulsión de diez diplomáticos estadounidenses fue anunciada debido a las violaciones sistemáticas cometidas por los funcionarios norteamericanos, incluidos agregados militares. Desde la Cancillería de Rusia acusaron a EE.UU. de apostar por una continua degradación de las relación y su política que apunta a contener a Moscú.
Lavrov también hizo pública una lista de ocho funcionarios estadounidenses que no podrán ingresar al país por su política antirrusa. Entre ellos figuran Merrick Garland, fiscal general; Michael Carvajal, director de la Oficina de Prisiones; Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional; Susan Rice, directora del Consejo de Política Doméstica; Christopher Wray, director del FBI, y Avril Danica Haines, directora de Inteligencia. También integran la lista John Bolton, quien fue asesor de Seguridad Nacional en la Administración de Donald Trump, y James Woolsey, antiguo director de la CIA.
Por otra parte, limitará y ordenará el cese de actividades de organizaciones no gubernamentales y fundaciones que interfieren en abiertamente en los asuntos internos de Moscú. Mientras que también se prevé que las sanciones demoren el retorno a Washington del embajador ruso Anatoli Antónov, que fue convocado por la administración de Vladimir Putin por consultas luego de que Biden lo llamara “asesino” en una entrevista televisiva.
"El embajador Antónov continúa las consultas. La situación es muy compleja", explicó Lavrov. El ministro agregó que el Kremlin recomienda al embajador de EE.UU., John Sullivan, regresar a su país para consultas con sus superiores.
El ministro de Exteriores apeló a la cordura de EE.UU. y pidió renunciar a la política de confrontación. "Los pasos dados son sólo una parte de los que están a nuestra disposición. A nosotros nos gustaría evitar una nueva escalada con EEUU", señala en el comunicado oficial.
“La realidad es que de Washington escuchamos una cosa y en la práctica vemos otra. No debe haber dudas. Ni una ola sancionadora quedará sin respuesta", continúa el comunicado del ministerio de Exteriores. También se refiere a la propuesta de Biden de llevar a cabo una cumbre ruso-estadounidense en un tercer país. “Cuando se hizo esta oferta, se recibió positivamente y ahora se está considerando en el contexto de los acontecimientos concretos”, afirmó el comunicado del ministro Lavrov.