La pandemia se hizo circular, y Pablo Javkin se ve un año después ante la obligación de dar el paso que la semana pasada había evitado: habrá más restricciones a la vida social en Rosario, con la misión de disminuir la circulación social del coronavirus. El comité de expertos ayer volvió a coincidir en lo inevitable de ir por mayor control social para llevar alivio a la capacidad vacante de camas de terapia intensiva en el sistema de salud, que ayer se angostó un poco más y marcó 92% de ocupación. Así lo recibieron el intendente y el gobernador Omar Perotti, y se descuenta que hoy informen de manera oficial las medidas a tomar (ver página 3). Por lo pronto, ambos acordaron ayer procurar mantener la presencialidad de clases y la mayor actividad económica posible, para evitarse polémicas como la que bullen en Buenos Aires, pero la decisión de suspender algunas actividades ha sido tomada.
"Estamos arriba del 90% de ocupación de camas y hay que tomar medidas, sin dudas", dijo el jefe municipal ayer al mediodía, al habilitar una estación de bicicletas en parque Alem. Por la mañana se había reunido con Perotti, y hoy lo hará de nuevo junto con otros intendentes, para definir cómo será la nueva etapa de restricción y anunciarlo.
Mientras tanto, el reporte diario de la Secretaría de Salud, le dio la razón a los médicos: 797 contagios más en 24 horas, 9 personas fallecidas, 6.257 pacientes con la enfermedad en curso, y la ocupación hospitalaria en aumento: 92% en el caso de plazas críticas, 89% de camas generales ocupadas. La diferencia con este momento del año pasado es que la mayoría de los pacientes no están por covid, y que su edad es menor. Esto hace que la posibilidad de posponer intervenciones médicas y generar espacio para pacientes covid ya sea más difícil. Y además, se agrega el detalle de que estos pacientes más jóvenes exhiben menos letalidad pero ocupan su cama por más tiempo.
"Esto es día a día, sabiendo que estamos en plena segunda ola. Tenemos un horizonte distinto al del año pasado porque hoy están las vacunas. No tenemos la misma incertidumbre que el año pasado, y el esfuerzo hoy tiene otro sentido. Acaba de confirmar Nación que llegarán más vacunas Sputnik V, y hay posibilidad que el fin de semana lleguen más desde China. Eso nos permitiría entre abril y mayo cubrir la población de riesgo. Hoy hay en la ciudad 160.300 personas vacunadas", dijo Javkin.
El intendente aceptó que el objetivo es ganar margen de maniobra en la capacidad del sistema de salud para garantizar la atención, y se mostró ocupado también en hallar un equilibrio entre la demanda de los expertos médicos y la reticencia del comercio y la economía en general. "Las reuniones sociales, masivas generan un riesgo, y eso implica tomar medidas", anticipó acerca de las decisiones que hoy se anunciarán de manera oficial, y que Rosario/12 anticipa hoy. Esto hará que se prohíba la circulación en auto, y se suspendan actividades culturales, religiosas y de deporte amateur.
Por otra parte, Javkin esquivó la polémica que enfrenta a los gobiernos porteño y bonaerense en torno a la presencialidad de las clases. "La escuela tiene un sistema de burbujas alternadas, debiera ser lo último en tocarse. Además hay un conflicto judicial... dejemos de discutir esto en la guerra política. Esto es una pandemia y hay que tomar medidas. Cuanto más conflictivas son y menos se acatan, menos impacto sanitario tiene. La idea es ser razonable, pero sabiendo cómo es la situación", vaciló Javkin.
También seguirían funcionando como hasta ahora las fábricas y los gimnasios, pero se analizaría alguna coordinación en la apertura de bancos y de comercios en el centro, tal como ocurrió el año pasado.
El intendente recalcó entonces que el 70% de los contagios ocurre en reuniones familiares y sociales y por eso avisó que la restricción apunta a ese aspecto. "La limitación de circulación es una medida a tomar. Todo lo que hacemos sin protocolo genera contagio cuando el nivel de circulación es alto, y lo vemos en cada fin de semana", adelantó.