Boca tuvo un debut feliz anoche en la Copa Libertadores 2021, con triunfo 1-0 ante The Strongest en Bolivia para pisar fuerte de entrada en el Grupo C, donde el martes Barcelona de Ecuador había dado la nota al vencer 2-0 a Santos en Brasil. La próxima cita será el martes 27 ante los paulistas en la Bombonera, mientras que ecuatorianos y bolivianos se medirá al día siguiente.
Si en algo coinciden los planteos de los equipos argentinos que visitan el mágico mundo de la altura de La Paz, donde hasta los más poderosos sucumben ante los locales, es que hay pegar primero. Y Boca cumplió con el mandato al pie de la letra con una muy buena definición de Villa a los 7 minutos, luego de un par de amagues dentro del área previa habilitación de Almendra. La jugada se originó con un desafortunado resbalón del 10 local, Castro, cuando el elenco boliviano presionaba. Aquella caída derrumbó el escalonamiento de los suyos como un castillo de naipes y dejó a Almendra con panorama. Y el volante de 21 años, de renovada confianza tras varios flojos semestres, no falló a la hora de ubicar al más peligroso de los suyos.
Si Russo festejó el gol bastante más de lo habitual es porque se veía venir el lógico quedo de los suyos. "Vamos Cristian (Medina), vamos Alan (Varela)", alentaba el DT a sus dirigidos, quienes sufrían piernas cada vez más pesadas. A los 20, The Strongest ya tenía a Boca replegado en su propio campo, aunque por limitaciones propias y un buen funcionamiento defensivo xeneize, llegar al arco de Rossi le resultaba una tarea un tanto más complicada.
El elenco porteño llegaba con varias bajas sensibles, pero bien compensadas dada la longitud del plantel de uno de los equipos más poderosos del continente. Con varios ausentes por coronavirus (Andrada -contacto estrecho-, Zambrano, Cardona, Campusano y Rojo), sin Fabra (suspendido) y sin Tevez (descanso), el DT echó mano a varios de los habituales suplentes, como Rossi y Soldano, y al grato trío juvenil de mediocampistas compuesto por Medina, Varela y Almendra, quienes tuvieron un buen rendimiento en el triunfo 2-1 ante Atlético Tucumán por la última fecha de la Copa de la Liga.
Boca salió a la segunda parte con la fórmula de la primera, aprovechar el descanso del entretiempo y definir la historia. En apenas tres minutos, el colombiano Villa tuvo dos situaciones clarísimas, pero primero definió a colocar al segundo palo y le erró al arco, y más tarde se la quiso picar de manera un tanto displicente al arquero, pero el veterano de 42 años Daniel Vaca ganó esa batalla. Ambas jugadas se iniciaron tras despejes desde el área xeneize, evidenciando que The Strongest estaba dispuesto a arriesgar al ir por el empate.
Pero las buenas intenciones de los bolivianos no pasaron de ahí. A pesar del exiguo resultado, Boca casi que no sufrió como le viene pasando en la temporada y consiguió un resultado valioso por el escenario y, ante todo, por el certamen, su gran y esquiva obsesión de los últimos años.