Un alpinista noruego que se proponía escalar el Everest dio positivo de coronavirus y debió ser internado en Nepal. El caso significa un duro golpe a los planes de retomar las actividades en el Himalaya luego de una temporada 2020 que como consecuencia de la pandemia devastó la industria del turismo en esa región y en todo el mundo
"Mi diagnóstico es covid-19", señaló Erlend Ness a través de Facebook. "Estoy bien (...) El hospital me está tratando", añadió. En su página de esa red social el escalador compartió fotos del campamento base del Everest, a 5.364 metros sobre el nivel del mar, y un video de su evacuación en helicóptero el 15 de abril.
Nepal flexibilizó recientemente las cuarentenas para los visitantes. Las restricciones se acotaron con el propósito de empezar a recibir a los montañistas nuevamente en la temporada que recién comienza.
Otros casos
Un hospital de Katmandú indicó que había otros casos positivos provenientes del Everest, aunque no precisaron cuántos.
"No puedo brindar detalles, pero algunos evacuados del Everest dieron positivo", señaló a la AFP Prativa Pandey, directora médica del hospital CIWEC de Katmandú.
"Una persona ha sido evacuada el 15 de abril, pero nos informaron que padecía neumonía y estaba siendo tratada aisladamente. Fue la única información que recibimos", añadió Mira Acharya, una portavoz del Departamento de Turismo de Nepal. Así, solo confirmó el positivo de Ness.
Sin embargo, la cadena de televisión noruega NRK, que entrevistó a Ness, indicó que un sherpa de su grupo también se contagió coronavirus. "Realmente, espero que nadie se infecte con coronavirus en las altas montañas. Es imposible evacuar personas en helicóptero cuando se encuentran a más de 8.000 metros", señaló Erlend Ness a NRK.
El caso de Ness generó inquietud en el campamento base. Además, abre interrogantes sobre la continuidad de la temporada.
La preocupación que hay entre los montañistas apostados al pie del Everest fue reflejada por Dawa Steven, sherpa y patrón de la empresa Asian Trekking. "Cuando nos enteramos que podría haber un caso de covid en el campamento base, todo mi personal y otros redoblaron sus esfuerzos para cubrirse el rostro, desinfectarse las manos y evitar contactos cercanos con el resto", relató.
Para esta temporada, Nepal ya había otorgado 377 permisos de escalada, y se esperaba que el número superara los 381 de 2019.
A partir de la llegada de centenares de montañista en la base del Everest se convirtió en una verdadera ciudad de carpas. La misma escena se reproduce al piel de otras montañas del Himalaya.
Los riesgos de la covid-19 en la altura
El oxígeno disminuye en la altura, por lo que la respiración es más difícil allí, lo que aumentaría el riesgo médico para los montañistas infectados por covid-19.
El año pasado, la pandemia se declaró poco antes del comienzo de la temporada de montañismo, lo que obligó a Nepal a cerrar sus fronteras. El impacto de esto fue devastador para miles de personas, desde los guías hasta los hoteleros, que ganan su vida con estas actividades.