El precio del dólar paralelo aumentó 5 pesos este viernes y cerró en 152 pesos. Acumuló un alza de 10 pesos en la semana y subió 13 pesos desde el mínimo del 7 de abril, cuando cotizó a 139. Con esto la brecha cambiaria entre el dólar oficial y el paralelo se ubicó en 63,2 por ciento. La cotización del dólar ilegal se acercó de esta manera a la del contado con liquidación, que cerró la semana en 153,15 pesos, al marcar una suba de 0,7 por ciento.
Los precios de los dólares financieros, a pesar de la suba de estos últimos días, siguen estando en torno de los 10 pesos por debajo del dólar ahorro. Se trata de la cotización que el equipo económico utiliza como referencia y se ubica en 162,99 pesos. Al tipo de cambio oficial deben sumarse el impuesto PAIS y el recargo a cuenta de ganancias para llegar a ese valor.
Operadores del mercado consideran que el salto del dólar paralelo genera ruido y provoca algo de volatilidad pero no resulta una amenaza a la tranquilidad cambiaria de los últimos meses. Indican que por el efecto de la segunda ola y la incertidumbre sobre qué pasara con la actividad económica es esperable que haya empresas e individuos que buscan cobertura.
Aseguran que la cotización del paralelo converge a la del contado con liquidación, una situación que ya se había observado en meses anteriores. Sin embargo el paralelo se mantiene 40 pesos por debajo de los picos alcanzados a finales de octubre del año pasado. En ese momento llegó a operar por arriba de los 190 pesos e implicó una brecha cambiaria por encima del 120 por ciento.
Compra de dólares
En ese contexto el equipo económico tomó medidas en distintos frentes que fueron claves para recuperar la estabilidad del mercado de cambio. Estas medidas continúan siendo efectivas y permiten a la autoridad monetaria adquirir divisas del superávit comercial.
En el último día de la semana el Banco Central pudo comprar 100 millones de dólares. Así lo estimaron fuentes del mercado que calculan que desde el viernes previo se acumularon compras por más de 440 millones de dólares. Este efecto se refuerza con los precios récord de la soja: en la bolsa de Chicago superaron los 560 dólares y alcanzaron picos en 7 años.
El elemento que genera algunas presiones para la demanda de divisas es el aumento de las importaciones. Esto se vincula con la recuperación del mercado interno en los últimos meses pero también con el intento de empresas de hacerse de dólares oficiales a través de las compras de bienes en el extranjero. El último dato de marzo mostró que las importaciones subieron 68 por ciento.
Bonos y acciones
Uno de los desafíos de los próximos meses se central en los precios de los activos financieros argentinos. El riesgo país se ubicó en 1578 puntos y marcó un descenso de 0,3 por ciento. Pero los bonos en moneda extranjera mantienen paridades cercanas al 33 por ciento y este viernes registraron caídas de hasta 1,9 por ciento.
La bolsa porteña se recuperó levemente un 0,5 por ciento y hubo acciones que llegaron a subir hasta casi 6 por ciento. En el acumulado de abril sin embargo la caída del Merval es del 1,3 por ciento y en el año del 7 por ciento. La incertidumbre respecto de cómo continuará la pandemia es uno de los puntos que frente la recuperación del mercado de acciones en el corto plazo.