Tras permanecer cerca de dos meses en estado de coma inducido, Agustín Edwards falleció en su residencia en la región de O'Higgins a los 89 años.. Fue el dueño del diario El Mercurio, conocido como “el decano de la prensa chilena”, y de otros dos diarios nacionales, veinte periódicos regionales y una radio.
Edwards fue el aliado clave de la dictadura de Augusto Pinochet, luego de haber sido uno de los impulsores de la caída del socialista Salvador Allende. En abril de 2016 fue acusado formalmente de "sedición" por su supuesta responsabilidad en los actos de incitación previos al golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.
Documentos desclasificados de la CIA confirmaron que, a través de El Mercurio, el gobierno del presidente Richard Nixon financió a la oposición chilena para propiciar el derrocamiento de Allende. A Edwards se lo acusa también de encubrir durante la dictadura numerosos crímenes cometidos por el régimen pinochetista hasta marzo de 1990.
En 2015 el Colegio de Periodistas de Chile decidió expulsar al empresario mediático por su complicidad con la dictadura. "Como gremio, lamentamos que se haya ido en la total impunidad", comentó la presidenta del Colegio, Javiera Olivares. En una declaración, el gremio periodístico recordó que los medios de Edwards "fueron el soporte comunicacional de la conspiración contra el sistema democrático al servicio del golpe militar".
El documental “El diario de Agustín” de los directores Ignacio Agüero y Fernando Villagrán contó en 2008 la historia del empresario mediático cómplice de Pinochet y de los montajes periodísticos para ocultar los crímenes de la dictadura. La película incluyó un breve reportaje a Edwards que contó con este diálogo:
“-¿A usted le pareció bien que luego del golpe Pinochet cerrara todos los diarios menos El Mercurio?
-Edwards: Pues sí. A cualquiera le gusta que le eliminen la competencia."