El consumo cayó en marzo 2,3 por ciento respecto del mismo período del año pasado, según el indicador mensual que elabora el Instituto de Trabajo y Economía de la Fundación Germán Abdala. Con esta caída, ya suman quince de manera consecutiva. En el primer trimestre, el consumo bajó un 1,6 por ciento anual, mientras que la medición sin estacionalidad no mostró variaciones. De esta forma, el consumo se estancó en el primer trimestre del año, luego del repunte intermensual de los últimos tres meses de 2016. “El menor dinamismo se encuentra vinculado al recrudecimiento de la inflación, vinculada no sólo a la suba de tarifas de servicios públicos, sino también a Alimentos, Bebidas y otros bienes de consumo masivo”, señaló el Instituto en su informe. Es el segundo relevamiento que muestra un retroceso en marzo ya que el miércoles pasado la consultora Scentia había informado que el consumo en los supermercados cayó 5,6 por ciento, con fuerte peso de alimentos.
Desde la devaluación de diciembre de 2015, el indicador retrocede sistemáticamente en la comparación interanual. El año pasado, la fuerte suba de precios provocó una perdida significativa del poder adquisitivo lo que repercutió en el consumo, el cual a su vez se comparaba con un 2015 en el que la economía creció 2,5 por ciento impulsada centralmente por el consumo interno. Este año se esperaba al menos un leve repunte en términos interanuales ya que la base de comparación era significativamente más baja. Sin embargo, el traspié oficial con el programa Precios Transparente, que eliminó momentáneamente las cuotas sin interés, y el repunte de la inflación en los primeros meses del año contrajo aún más el gasto de las familias, lo que llevó a que la comparación interanual siga dando negativa, aún con 2016.
La Fundación Abdala destacó en su informe, para demostrar la caída del consumo, que en marzo las ventas minoristas que releva CAME cayeron 4,4 por ciento interanual y las ventas de autos nacionales bajaron 31,8 por ciento anual. A su vez, remarcaron que el crédito real en pesos al sector moderó su caída (5,9 por ciento anual), aunque perdió dinamismo en relación al bimestre previo.
El dato se suma al de la consultora Scentia que relevó en marzo una caída aún mayor, de 5,6 por ciento, igual porcentaje de merma que acumuló el trimestre. Si se analiza la evolución de las ventas en volumen por rubro, el que mostró la mayor caída fue el de “alimentación”, que se contrajo 7,8%. Esta merma estuvo explicada, en parte, porque Semana Santa el año pasado cayó en marzo y este año, en abril. El segundo lugar lo ocupó el rubro de “perecederos y frío”, que se contrajo 6,7 por ciento; seguido de “limpieza de ropa y hogar”, que obtuvo 6,4 por ciento menos de ventas. A su vez, los productos de “desayuno y merienda” cayeron 5,5 por ciento y los de “higiene y cosmética” y las “bebidas sin alcohol”, 4,8 por ciento. Las bebidas con alcohol son las que mostraron la mejor performance en marzo, con una caída de apenas 1 por ciento respecto del mismo mes del año pasado. En términos acumulados, las mayores bajas del trimestre son las de los productos de limpieza y hogar (-7 por ciento), seguida por los perecederos y frío (-6,9 por ciento).