Empleados de la tradicional empresa vitivinícola Lavaque, que produce los vinos Quara en Cafayate, sostuvieron un paro durante toda la semana pasada reclamando el pago total de sus sueldos del mes de marzo, ya que hasta la fecha, solo les habían depositado una parte de lo acordado. Esto, según los que trabajan allí, es recurrente por parte de la firma A la protesta también se sumaron unos 50 jornaleros que prestaron sus servicios durante la vendimia y que aún esperan se les acredite lo acordado.

El paro con movilización, se instaló en la puerta misma del establecimiento vitivinícola, sobre la Ruta 40, donde realizaron cortes intermitentes, lo que le valió al secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Vitivinícolas y Afines de Cafayate (SOEVA), Nelson López, una denuncia penal en su contra por impedir el ingreso a la bodega a integrantes de la empresa.

López, en diálogo con medios locales manifestó que están cansados de los incumplimientos y maltratos laborales. A los reclamos salariales, sumó que desde hace tres años no se les provee ropa de trabajo. Según el sindicalista, la firma utiliza ese mecanismo de pagar los sueldos en partes y durante el mes sistemáticamente, algo que no quieren que vuelva a suceder.

“Hace 3 años que no les dan el calzado y  cuando le dieron era de muy mala calidad. Al poco tiempo ya se le había despegado la suela a algunos”, confirmó López a Radio Cafayate.

También comentó que desde el último reclamo, en diciembre del 2020, antes de la temporada de cosecha, no tuvieron más novedades ni respuestas por parte de la Secretaría de Trabajo de la provincia, que no convocó a ninguna audiencia de conciliación “para que se obligue a la empresa a cumplir con las normas básicas”.

“El secretario de trabajo dice que enviaron a un inspector a que revisara las instalaciones y algunos compañeros dicen que la inspección no duró ni media hora”, aseguró López. 

Además insistió con que desde hace diez años el régimen de pago de Quara consiste en entregar el 70 por ciento del sueldo antes del 10, y el resto cerca al finalizar el mes, “y en algunas ocasiones hay más fraccionamientos”. Por lo que en el reclamo exigen que se abone el 100% en los primeros días ya que esa bodega cuenta con los ingresos suficientes para hacerlo.

El secretario general recordó que ese rubro fue uno de los exceptuados y que en ningún momento hubo algún parate en la producción, que incluso obtuvo ventas record durante las etapas de aislamiento y distanciamiento social provocadas por la pandemia.

Por último, contó que la adhesión al paro fue del 95% y que esperaban que se concrete una reunión entre el delegado gremial de la empresa y la Secretearía de Trabajo para el día jueves o viernes de esta semana.

Un integrante de un sector autoconvocado de trabajadores de la vid, Samuel Huerta, le confirmó a este medio que el reclamo era por la forma de pago que practica la empresa, “siempre termina de depositar el dinero después del 20” a sus más de 30 empleados efectivos. “Les van pagando primero $6.000, a los días les dan otros $4.000, y así, pero las cuentas y las tarjetas llegan todas solas, y hay que pagarlas”, sostuvo Huerta.

Pero a su vez, quienes habían trabajado en la cosecha, aún esperaban que se les paguen “algunas fichas”, que son la cantidad de barriles que completan y que es lo que las empresas abonan por su trabajo a destajo. Esos jornaleros representan unos 50 “que siguen esperando su liquidación”.

“Mientras, la empresa sigue fraccionando el vino y sigue funcionando normalmente, no pueden decir que no tienen ingresos”, expresó. Según Huerta, Francisco Lavaque, uno de los propietarios del emprendimiento, fue el que, al encontrarse con la manifestación cortando el ingreso a la finca “mandó a una de sus secretarias a denunciar a López”. Pero aseveró que “Lavaque inventó que le impedían el paso, porque justo lo encontró al secretario General ahí con su camioneta”.