Tras el sabor amargo que le dejó el debut con derrota en la Copa Libertadores en su presentación como local ante Flamengo, este martes Vélez visitará a la Liga de Quito, en la altura de la capital ecuatoriana, por su segundo encuentro en el certamen más importante del continente.
Luego de que el regreso a la competición -tras siete años de ausencias- no fuera el esperado, los dirigidos por Mauricio Pellegrino irán desde las 19.15 (televisa ESPN) por un resultado que les permita dejar atrás la desazón de la caída por 3-2 en el estadio José Amalfitani, cuando los de Liniers estuvieron dos veces arriba en el marcador pero terminaron superados por la jerarquía de los brasileños.
En uno de los grupos más difíciles de la Copa, a Vélez le urge recuperar esos puntos perdidos en casa y este martes activará la dura misión de conseguirlos en la siempre complicada altura de Quito. Para esa tarea, Pellegrino presentará un equipo descansado ya que la mayoría de los titulares no jugaron en el triunfo del domingo ante Lanús (2-1), donde se consiguió la clasificación a los cuartos de final de la Copa de la Liga. Las bajas más importantes serán las del defensor Lautaro Gianetti, quien dio positivo en coronavirus, y la del mediocampista Federico Mancuello, expulsado contra Flamengo.
Luego del partido contra Lanús, la delegación velezana viajó directamente desde Ezeiza hacia Guayaquil y se trasladará a Quito unas horas antes del partido para neutralizar los efectos de la altura. La Liga, por su parte, se estrenó con un positivo empate por 2-2 en Chile ante Unión La Calera, con un doblete de Billy Arce.
La Liga, equipo campeón en 2008, es dirigida por el uruguayo Pablo Repetto y cuenta con los argentinos Adrián Gabbarini y Ezequiel Piovi en su plantel. El conjunto ecuatoriano, a diferencia del argentino, no tuvo actividad el fin de semana: la fecha del torneo local fue postergada porque Ecuador país atraviesa un estado de excepción por la gran cantidad de casos de Covid-19.
Vélez irá por la victoria con el antecedente de saber lo que es ganar en la altura de Quito por la Libertadores, ya que en los últimos años se enfrentó con equipos ecuatorianos. El último antecedente, en la edición 2011, será seguramente recordado por los corazones velezanos. Aquella vez, el equipo de Ricardo Gareca, con goles de Ricky Álvarez e Iván Bella, venció a la poderosa Liga que dirigía Edgardo Bauza, en una escena de esas que, cuando se evocan, invitan a soñar.