“La premisa es bajar la cantidad de contagios. Debemos garantizar que la circulación y los contactos sociales sean lo menor posible. Hay que hacer ese esfuerzo. Esta película ya la vimos todos. Se tomaron medidas en el AMBA y la preocupación es por otros conglomerados por la irradiación hacia el interior”, expresó Alberto Fernández durante la reunión virtual que mantuvo con doce gobernadores de las provincias del norte grande y San Juan. Con ellos evaluó la situación sanitaria y trabajó sobre las medidas que se implementarán a partir del próximo viernes cuando expiren los dos DNU vigentes. En tanto, hoy se reunirá con los doce jefes provinciales restantes. La preocupación del Gobierno es que, si bien el centro de los contagios hasta ahora era el AMBA, esa situación está empezando a irradiar al resto de las provincias y hay grandes centros urbanos muy afectados.

El Presidente habló con los gobernadores desde el salón Norte de la Casa de Gobierno y estuvo acompañado de la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y el ministro del Interior, Eduardo de Pedro. La conversación duró dos horas y media y en ese lapso estuvieron los mandatarrios de Jujuy, Gerardo Morales; Raúl Jalil de Catamarca; Gustavo Sáenz de Salta; Jorge Capitanich de Chaco; Gustavo Bordet de Entre Ríos; Oscar Herrera Ahuad de Misiones; Gustavo Valdés de Corrientes; Ricardo Qunitela de La Rioja; Juan Manzur de Tucumán; Gildo Insfrán de Formosa; Gerardo Zamora de Santiago del Estero y Sergio Uñac de San Juan.

Al comienzo de la reunión Vizzotti realizó una descripción de la situación sanitaria, subrayó el riesgo que implican las nuevas variantes e hizo un repaso sobre el estado del mapa epidemiológico en todo el territorio nacional y del plan de vacunación. La demanda de oxígeno fue otro de los tópicos, ya que es una de las grandes preocupaciones de estos días del gobierno y expertos. Es más una vez concluido el encuentro con los mandatarios provinciales, Vizzotti, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, se reunieron con empresarios de las tres empresas que producen oxígeno en el país para ver qué medidas tomar al respecto. “Necesitamos seguir bajando los casos. Con este escalón no fue suficiente”, dijo Vizzotti y agregó que “ya hemos tenido reunión con expertos, gobernadores, luego con el Consejo Federal de Salud y con el Comité de Bioética”.

Las reuniones no se limitaron a las provincias norteñas. Más temprano, Cafiero se reunió con sus pares de provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, y el porteño, Felipe Miguel. Este encuentro, que no se repetía desde que Rodríguez Larreta decidió diferenciarse de las políticas preventivas del gobierno nacional, sirvió para analizar los datos epidemiológicos del AMBA frente a la crítica situación que se vive por la segunda ola.

Según fuentes oficiales, en la reunión existieron coincidencias respecto de la “tensión” en la que se encuentra el sistema sanitario y la necesidad de fiscalizar y fortalecer las restricciones ordenadas, mientras que habrá una nueva reunión en 48 horas para definir si se avanza en nuevas medidas. Cafiero advirtió sobre la falta de control y cumplimiento de los protocolos, en particular en la Ciudad de Buenos Aires. A su turno, Miguel sostuvo que, según los datos de la Ciudad, la curva de casos comienza a descender “lentamente”, algo que desde la Nación no rechazan, pero relativizan. “Una meseta o casos por encima de 3 mil en la Ciudad, es una catástrofe sanitaria”, señalaron desde la Rosada.

Los gobernadores

El gobernador opositor de la provincia de Jujuy fue uno de los primeros en hablar y expresó que tenía una gran preocupación porque “en algún momento nos van a explotar los casos nuevamente”. En ese sentido, explicó que en su provincia funcionaron de forma positiva distintas medidas como la de restringir la circulación “según número de documento par e impar”, y subrayó que en Jujuy “hemos tomado medidas como restringir la circulación nocturna, controlar las reuniones sociales y que en las escuelas vayan la mitad de los grados”. Por otra parte, según informaron desde el Gobierno, “Morales se mostró muy conforme con el trabajo de Nación”, y al finalizar denunció que, al igual que a muchos gobernadores, trató con gente –a la que calificó de “buscas”– que llegaron a su provincia ofreciendo vacunas “pero nos pidieron depositar en fondos fiduciarios y que luego de investigar descubrimos que eran inmobiliarias”.

Capitanich expresó que en los últimos 30 días han tenido en Chaco un incremento de los casos en niños de 0 a 19 años y que en la provincia se disparó el número de contagios e internaciones. “En los últimos cuatro meses tuvimos más casos que en los primeros diez de pandemia”, destacó. Luego, agradeció a Nación ya que “el plan de vacunación nos está impactando muy bien y está funcionando”. El gobernador pidió ayuda para fortalecer el número de camas, pidió más respiradores, una mayor provisión de oxígeno y más medicamentos para pacientes covid.

Cuando tocó el turno de Misiones, Herrera Ahuad indicó que “la situación está controlada, porque nunca hubo apertura masiva de actividades”. Destacó el trabajo que se viene realizando en las fronteras desde el Ministerio de Seguridad nacional, e indicó que en su provincia no fueron liberadas las cirugías programadas. Sobre la presencialidad en las escuelas, puntualizó que “es alternada y con pocos alumnos”.

En cuanto a la situación de Salta, Sáenz opinó que todas las provincias deberían “tomar medidas conjuntas”. “Si no tomamos decisiones a tiempo se nos mueren los argentinos y la muerte no tiene solución”, puntualizó. El gobernador también pidió disculpas al Presidente por su enojo durante el año pasado por los respiradores: “me demostraron que el reparto nacional fue equitativo”, aseguró. Con respeto a las vacunas también agradeció la distribución federal y dijo que “quisimos salir a comprar y es imposible para las provincias conseguirlas”. Por último, pidió respiradores.

Valdés informó que en Corrientes hay “ciudades muy complicadas, sobre todo el sur de la provincia”, y comentó que están “peleando mucho en el interior”. Se sumó al agradecimiento por los buenos resultados de la vacunación.