"La gente siempre sale agradecida después de ser vacunada", dijo a PáginaI12 el secretario general de STTEBA, Roberto Baradel, sobre cómo desde el gremio se sumaron a la campaña contra el coronavirus. Más allá de las críticas de algunos opositores, que se inscriben en la política general de horadar cualquier acción contra la expansión del virus, Baradel señaló que "Estamos convencidos que la solidaridad tiene que ser concreta. Y dio un ejemplo de cómo hacer el bien sin mirar a quién. El gremio firmó un convenio con la ciudad de La Plata, donde gobierna Juntos por el Cambio, para que el hotel del sindicato esté al servicio del municipio como Centro de Atención Intermedia. Es para las personas que se contagien de coronavirus que no puedan cumplir con el aislamiento en sus casas y tengan un grado no grave de problemas con la respiración", apuntó Baradel poniendo sobre la mesa que la salud de la población es más importante que las diferencias políticas.
Son 35 edificios que fueron ofrecidos por el sindicato docente a las autoridades provinciales para aportar al combate contra el coronavirus en la campaña de vacunación. "En principio estos centros de vacunación estaban destinados a los docentes, los auxiliares docentes y el personal policial. Después, como funcionaban bien para descomprimir a los centros de salud, se abrió la vacunación a la sociedad", explicó el dirigente sindical. El convenio firmado con IOMA estipula que el personal que atiende en los centros los envía el ministerio de Salud, por lo que los docentes solo asisten para vacunarse.
"El ministro de Salud (Daniel Gollan) pidió a IOMA que se ocupe de la vacunación de los docentes al personal policial y otros grupos y formamos un convenio con la Federación de Clínicas para asesorarnos", aseguró Homero Giles, el titular del IOMA; a este diario y agregó que "para no saturar los centros de salud armamos 63 puestos de vacunación. Para ello solicitamos la colaboración de los gremios que están en IOMA, en lugares que cuentan con las medidas sanitarias y edilicias para vacunar como edificios en condiciones, luz e internet". Es decir que además de los 35 lugares que puso Suteba para dinamizar la campaña de vacunación, también aportan los gremios docentes Udocba y Sadop y los estatales ATE y UPCN que completa los 63 puestos de vacunación en donde hasta el lunes fuero inoculadas 229.670 personas.
"En los puestos de vacunación que ponen en este caso los sindicatos llevamos gazebos, freezers para mantener las vacunas, grupos electrógenos y distintos sistemas de vigilancia y alarma para monitorear la temperatura", señaló Giles y apuntó que "los vacunadores, los auxiliares y los enfermeros están todos capacitados por el ministerio de Salud". Los enfermeros que asisten a a cada puesto de vacunación evalúan la reacción de las personas a la vacuna, y observan que no tengan reacciones alérgicas antes de retirarse.
Uno de los puntos de vacunación de Suteba a los que la oposición y algunos medios apuntaron fue la seccional de Vicente López. "Los gazebos los pone el gobierno provincial y son para que la gente espere en lugares ventilados y sin tener que estar sometidos a los rayos del sol. Nuestro rol allí, es de asistencia en todo caso a las personas que se paran a preguntar o que tiene algún problema para inscribirse. Lo hacen afiliados al gremio después de su horario laboral, es decir, de manera absolutamente solidaria y para que descomprimir la tarea de los trabajadores de la campaña de vacunación", afirmó Jorge Pérez, secretario adjunto de Suteba en Vicente López.
"Esto no es más una operación de Juntos por el Cambio con la complicidad de la corporación mediática para deslegitimar la campaña de vacunación y a las asociaciones gremiales", destacó Baradel, quien sufrió el ataque constante durante el gobierno de la macrista María Eugenia Vidal. "Han señalado a los centros de Suteba de la zona Norte. Evidentemente tienen miedo de que la gente que va a vacunarse, que no tiene ideologías sino que solo quiere preservar su salud, se da cuenta de que no es como le cuentan los medios y los dirigentes de JxC, y eso puede restarles adhesiones", analizó el dirigente gremial y agregó que "el odio que tienen es porque no pudieron doblegarnos. Nosotros somos como nos ven. Ni ladrones, ni mafiosos como ellos quisieron hacerle creer a la gente".