El oficialismo buscará la ratificación parlamentaria del último Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) del Poder Ejecutivo para mitigar la propagación de la pandemia de covid-19 en el país. La comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo se reunirá este miércoles por la mañana para emitir dictamen a favor del DNU 287 del 30 de abril que establece medidas generales de prevención y disposiciones locales y focalizadas desde el 1 de mayo hasta el 21 de este mes, de acuerdo con cuatro niveles de parámetros sanitarios para tratar de contener la segunda ola de coronavirus y evitar el colapso del sistema de salud. El Frente de Todos cuenta con los votos necesarios en la Bicameral para avanzar en la validez del DNU, que con la aprobación de una de las Cámaras del Congreso adquiere fuerza de ley. Especialmente ante la rebeldía de algunos distritos, como la Ciudad de Buenos Aires que judicializó la suspensión de las clases presenciales a pesar de formar parte de la región del AMBA que esta bajo “alarma epidemiológica”, el nivel más alto y complejo que fija el decreto sobre la propagación de la pandemia.
El presidente de la bicameral, el diputado Marcos Cleri (FdT), convocó formalmente a la comisión para este miércoles a las 9 de la mañana para tratar en forma virtual y como único tema el DNU 287 del Ejecutivo. El oficialismo cuenta allí con los votos necesarios para ratificar el dictamen a favor de la validez del decreto presidencial, de la misma forma que lo hizo hace dos semanas con el DNU que estableció nuevas restricciones en el Amba ante la segunda ola de la covid y a lo largo de toda la pandemia.
Su tratamiento y ratificación por unas de las Cámaras del Congreso le otorga al DNU fuerza de ley. Una tarea que seguramente asumirá el Senado, donde el oficialismo también cuenta con mayoría y a pesar de la resistencia que ofrece el sector más intransigente del interbloque macrista de Juntos por el Cambio, que se opone las restricciones a pesar de la crisis sanitaria.
El decreto establece que hasta el 21 de mayo seguirá la prohibición de la circulación entre las 20 horas y las 6 horas de la mañana de cada día. Según las jurisdicciones, las autoridades podrán solo ampliar estos horarios en función de las especificidades de cada lugar. Mientras el transporte público será para los trabajadores esenciales y autorizados. También define la suspensión de las clases presenciales en aquellas jurisdicciones mas complicadas por la covid.
Por eso, el DNU estableció cuatro categorías para clasificar y establecer un mapa epidemiológico del país: “situación de bajo riesgo”; de “riesgo medio”; de “alto riesgo epidemiológico y sanitario”; y de “alarma epidemiológica y sanitario”. Parámetros que se establecen a través de tres factores: el aumento de casos en últimos 14 días; la incidencia de cantidad de casos sobre la población; y la ocupación de las camas de terapia intensiva (UTI).
De acuerdo a esta clasificación, las regiones mas comprometidas y en alarma epidemiológica son el Amba (CABA y 35 municipios del conurbano bonaerense); las ciudades de Mar del Plata y Bahía Blanca en la provincia de Buenos Aires; también las ciudades de Godoy Cruz, Luján de Cuyo, Guaymallén, Las Heras y Maipú en la provincia de Mendoza); además de Rosario y San Lorenzo, en Santa Fe.
Pero no todos estos distritos adhirieron a las medidas que establece el DNU presidencial. Caba y Mendoza (gobernadas por la coalición macrista de JpC) decidieron mantener las clases presenciales, aunque la provincia cuyana aumenta restricciones y prohíbe las reuniones familiares, al tiempo que cuestiona la clasificación. El gobernador santafesino, el peronista Omar Perotti, decidió suspender solo una semana las clases presenciales y evaluar el resultado de las restricciones.
Apenas una categoría mas abajo hay 118 ciudades y departamentos de las provincias de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, La Pampa, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis, Santa Fe, Tucumán, Tierra del Fuego, Santiago del Estero, Jujuy, La Rioja, Santa Cruz.
Por eso el oficialismo decidió apurar el trámite parlamentario que blinde constitucionalmente el DNU de Alberto Fernández y ayude a terminar con la resistencia de quienes se niegan a establecer restricciones que buscan evitar el colapso del ya saturado sistema sanitario frente a la segunda ola de la pandemia y mientras avanza la compaña de inmunización de la población con la llegada de mas vacunas.