Carolina Chavarria trabajaba como auxiliar de maestra jardinera, en el Centro de Primera Infancia (CPI) Armada Argentina de la ciudad de Salta que depende del Ministerio de Desarrollo Social y permanece desaparecida desde el 26 de agosto de 2019. Las vecinas y compañeras de trabajo aseguraron que la mujer era víctima de violencia de género sin embargo esa versión parece no haber sido tenida en cuenta por la justicia.
¿Quién la busca?, al parecer en el tiempo transcurrido las únicas que han manifestado preocupación por conocer el paradero de esta mujer y por saber si sigue o no con vida, han sido sus compañeras de trabajo y vecinas, ella ni siquiera figura en el registro provincial de personas desaparecidas. Las mujeres aseguraron que el esposo de Chavarria, Juan Carlos Campero, quien hizo la denuncia en la Sub Comisaría del barrio Castañares por la desaparición en su momento, las amedrentaba para que no colocaran carteles de la búsqueda y se mostró molesto por ello.
Salta/12 solicitó información al Ministerio Público Fiscal, el área de prensa informó que la causa pasó a la fiscala Mónica Poma de la Unidad de Femicidios quien "dispuso la continuidad de medidas en procura de dar con el paradero de la mujer", sin embargo se desconocen esas medidas. "Estando (la causa) en la Unidad de Graves Atentados, se realizaron búsquedas provinciales y nacionales y no se la había podido localizar, incluso se investigó a quien fuera su pareja", comunicaron.
Las compañeras de trabajo de Chavarría fueron quienes se movilizaron desde los primeros días de su desaparición y lo hicieron visible. Una vecina relató a Salta/12 que tienen conocimiento de que ella era víctima de violencia de género, manifestó haber escuchado golpes y ruidos, incluso la noche anterior a su desaparición. "Siempre hubo violencia familiar. Siempre se escuchaba", expresó. Contó que la casa de Chavarría estaba en construcción, era habitual que los obreros estuvieran trabajando e hicieran ruido, pero no en horas de la noche, lo que les resultó extraño.
Consultadas por Salta/12 las compañeras de trabajo de la mujer, manifestaron que no tuvieron más novedades de ella. Al igual que sus vecinas, temen que Chavarría haya sido víctima de femicidio.
Después de la denuncia por la desaparición de Chavarría, personal del Cuerpo de Investigaciones Fiscales trabajó en su domicilio. La vecina contó que hubo testigos de ese operativo, del barrio, quienes relataron que se encontró una media sombra con ropa de Chavarría enterradas y que cuando se usó un líquido surgió que había en esas prendas "manchas de sangre" pero "el cuerpo no estaba y ella no apareció por ningún lado". Según especificó la mujer, personal del CIF trabajó ese día desde las 7.30 hasta las 20.
"Lo último que se dijo fue que la vieron en Rosario de Lerma pero no afirman que la encontraron". El Ministerio Público Fiscal había informado el 3 de octubre de 2019, que Chavarría fue vista luego de su desaparición en Chicoana y Rosario de Lerma. Sin embargo, no hubo precisiones de dónde, cuándo, por quienes, ni una confirmación de que fuera ella. Pese a esta versión, la mujer no fue localizada y hasta la fecha no se sabe nada.
La vecina también contó que Chavarría daba clases particulares a niñxs en su casa, y que mientras se encontraba con una estudiante, el marido le habría gritado por lo que la nena se tuvo que retirar después, pero relató esa situación.
Desde que desapareció Chavarría, la vecina dijo que el marido intentó asociar esto al hecho de que ella tenía deudas. La hipótesis policial también apuntaba a que ella “ya tenía previsto retirarse del domicilio y asociaban la desaparición de Chavarría con una toma de decisión que estaría "relacionada a la situación económica”. Sin embargo, la vecina dijo que parte de esas deudas eran con una mujer colombiana que además le había prestado dinero a otras mujeres del barrio, "no es gente mala, la conocemos de años. Es una chica muy paciente, muy entendida", aseguró la vecina, quien además dijo que la deuda de Chavarría fue saldada por otra vecina quien "la terminó pagando". Además detalló que Chavarría tenía también una deuda por "un préstamo grande" con un vecino que se dedica a esto. En su momento, la Policía de Salta, informó que registraba también cuenta por mora en el Banco de Servicios Financieros SA.
La vecina consideró que los préstamos que solicitaba Chavarría eran para la construcción de la casa familiar. "Ella estaba re contenta con su trabajo, emocionada porque el hijo iba a terminar el secundario (…) Ella no iba a abandonar a sus hijos (tres varones y una niña) ", manifestó. "Ojalá se haya ido y esté bien porque sufría mucho (con el marido)", explicó.
Según manifestó la vecina, otra mujer del barrio ya fue a declarar en 2019 todo lo que ella contó para esta nota en el Ministerio Público Fiscal. Tienen miedo porque contaron que por haber colocado carteles, o hablado en los medios, han recibido luego reproches por parte del esposo y uno de los hijos mayores de la mujer. Además señaló que le llama la atención que la familia no la busque.
La última vez que vieron a Chavarría vestía una calza negra, campera negra tipo chorizo y zapatillas. Cuando desapareció tenía 41 años, mide alrededor de 1,50, tiene cabello ondulado, castaño y es de tez morocha.