Arsenal de Sarandí fue mucho más pragmático y se impuso en forma categórica a un ineficaz Jorge Wilstermann de Bolivia por 3 a 0, al cabo de un aceptable encuentro disputado esta noche en el estadio "Julio Humberto Grondona", en el marco de la tercera jornada del Grupo C de la Copa Sudamericana. Lucas Albertengo, al minuto de la etapa inicial, inauguró el marcador para el conjunto de Sergio Rondina. Ya en el complemento, el uruguayo Jhonatan Candia, a los 38 y 41 minutos, le dio cifras definitivas al marcador para el dueño de casa. Si bien la diferencia aparece como algo exagerada, la formación local se mostró más homogénea y venció con justicia.
Favorecido por el madrugador tanto de Albertengo, quien tras parar con suma calidad una asistencia no menos vistosa de su compañero de ataque Candia, definió junto al palo derecho del arquero Banegas.
A partir de la tempranera apertura el anfitrión manejó el cotejo en el primer cuarto de hora aunque lejos de desmoralizarse la escuadra del argentino Diego Cagna pugnó por arribar a la igualdad en la última media hora del primer tiempo pero careció de la suficiente puntería como para trasladar en la red su más que evidente superación.
Advertido de la merma futbolística de su equipo, el entrenador local ordenó el ingreso del juvenil Picco, quien resultó algo más gravitante que el indolente Alan Ruíz.
A partir de dicha reformulación estratégica Arsenal volvió a tener el partido bajo control logrando a través del hoy indómito Candia dos conquistas que pueden resultar muy útiles en caso de igualdad en puntos a la hora de la definición de la zona.
En la primera de ellas, el goleador recibió una asistencia de Picco, quien descargó en el delantero "charrúa" al no poder definir por su cuenta y en la segunda concretando después que el citado Picco abriera sus piernas a modo de lujosa asistencia.
La formación de Cochabamba pudo haber descontado mediante el colombiano Humberto Osorio, quien estrelló un remate en el madero sobre las postrimerías del match, eventual conquista que hubiera colocado los guarismos un poco más a tono a los reales merecimientos de uno y otro equipo.