En la última semana el Ministerio de Cultura y Turismo, renuncia de ministro de por medio, quedó bajo la órbita del Ministerio de Planificación y Modernización. La intención es convertir el área de Turismo en un Ente de gestión mixta, público-privada, proyecto en el que se estaría trabajando para enviar a la Legislatura. De este modo, la Secretaría de Gestión Cultural quedaría otra vez desjerarquizada bajo la órbita de otro ministerio.
En el campo artístico en particular, la provincia es la única de la región que no posee salones ni concursos de estímulos a las artes.
Catamarca/12 consultó a artistas de diferentes manifestaciones para conocer qué piensan sobre las políticas culturales de la provincia y la necesidad de fomentos.
Literatura
La escritora y presidenta de la SADE, Hilda García, señaló que "en el ámbito oficial, una política del libro o para el libro, no puede ni debe desligarse de otras políticas más generales como la cultural y la financiera, por ejemplo, y debe fijar con todos los sectores las reglas a respetar”.
García, quien fue autora de ordenanzas a favor del libro siendo concejala de la capital, advirtió que “Catamarca tiene instrumentos legales que respaldan la actividad editorial a través de la Ley del Creación del Fondo Editorial y de la ordenanza de Creación de la Editorial Municipal. En cuanto a concursos, existe la reglamentación de la convocatoria a los Premios a la Producción Intelectual y Artística de la Provincia y la ordenanza de convocatoria a los Premios Trienales de Literatura, que fueron cumplidos en este último caso hasta el año 2014. Esta es la cuenta pendiente que tienen nuestros organismos oficiales y creemos que es este tiempo el momento de revertir, cumpliendo las leyes que estimulan y protegen al escritor”.
Consultada sobre los motivos por los que estas herramientas no están activas, Celia Sarquís, escritora y directora de Bibliotecas y Archivo de la Provincia, dijo que “los premios se trabaron por varios aspectos, se desactualizaron los montos, los presupuestos que tenían, hubo demoras en la entrega de premios, etcétera.”
Sarquís, quien coordina el Mercado del libros, una feria municipal que viene organizando la provincia en la Casa de la Cultura, contó que al inicio de la gestión del actual gobierno se planteó retomar los Premios a la Producción Intelectual y Artística de la Provincia, pero hasta ahora la comunidad no ha tenido conocimiento de que se esté implementando gestiones en este sentido.
Artes Visuales
Celina Galera es una de las artistas visuales más importantes no solo de Catamarca, sino de la región, también es docente en el Instituto Superior de Arte. Galera lamentó que “Catamarca es la única provincia de la región que no tiene ningún tipo de premios de artes visuales”. También señaló que las colecciones que tienen los museos, salvo el Caravati, que ha comprado alguna obra a los artistas que han expuesto allí, han dependido exclusivamente de donaciones, “ni siquiera han adquirido obras a través de premios”.
Galera resaltó: “Un concurso no solo estimula la producción local y marca la pauta de lo que está pasando en la escena local, sino además estimula público. Yo le hablo a mis alumnos de artistas contemporáneos de la edad de ellos que están obteniendo premios en los salones y que están rodando en todas las provincias, menos por Catamarca. Ellos solo pueden conocer las obras por imágenes y por las redes”.
La artista, que participó hace poco en el Salón Federal del Centro Cultural Néstor Kirchner, puntualizó que en estos momentos no solamente no hay salones en Catamarca, sino que cada vez es más difícil mandar las obras a los salones federales y nacionales porque los costos son muy altos, y “la Secretaría de Cultura no se ocupa de mover a sus artistas”.
Música
Tal vez, lo más importante en cuanto a política cultural que ha pasado en los últimos tiempos en Catamarca, fue la Ley de Cupo Femenino en la Música, lograda por el movimiento de mujeres músicas, Margaritas.
A nivel fomento la situación no dista de las demás manifestaciones. Para la cantante Natalia Brizuela, por fuera del festival de la Feria de El Poncho “no hay una política cultural que se lleve adelante pensada para gente que vive de la cultura”.
La violinista Lela Folquer puso el ejemplo de que hay un Conservatorio Provincial de Música que forma instrumentistas, sin embargo, cuando vienen artistas de afuera, contratan a orquestas e instrumentistas de otras provincias sin tener en cuenta a los músicos de la provincia.
En tanto, para el músico Ricardo Bujaldón, “el Estado debe ser una alternativa al mercantilismo de los medios que impera en el mercado de bienes culturales”, y propone soluciones prácticas: “En este país la única política que puede profesionalizar el trabajo de los músicos es el establecimiento de leyes y disposiciones del Estado que impongan a todo restaurante, casa de comidas, pub, salones de baile, discotecas, bares, etcétera, la obligación de tener números musicales en vivo”.
Teatro
El teatro independiente es tal vez la actividad más azotada por la pandemia. En Catamarca, cuando se levantó la cuarentena en el verano, no se habilitaron los teatros. Actualmente se sigue en etapa roja, y aunque están permitidas ferias, bares y restaurantes, aún está prohibida la apertura de los teatros y las actividades culturales.
Oscar Németh, director y profesor de teatro, y gestor de un espacio cultural en Valle Viejo, observó la necesidad de "generar dramaturgias locales para la infancia y la experimentación a través de concursos”. También señaló que los grupos teatrales deberían girar, y aprovechar las salas que hay en el interior. Piensa que la presencia de festivales de distintas manifestaciones de manera constante puede ser una alternativa para el desarrollo. Además, recordó que el Festival Intercolegial de Teatro se perdió.
Danza
Tomás Galván y Gimena Herrera, son una pareja de bailarines de tango catamarqueña que con la pandemia tuvo que volver a establecerse en la provincia, luego de años de actividad internacional. Ambos fundaron y dirigieron el grupo Malevaje.
Para ellos, el foco tiene que pasar por la visión de los funcionarios. "Lo que falta es que todos los funcionarios tengan real intención de conocer la danza y no tomarla solamente como un espacio recreativo. Desde que algunos funcionarios consideran que la danza es algo minúsculo, deja de cobrar importancia. Y está en lo cultural, en lo artístico, también en la salud y muchos otros ámbitos sociales".
En el mismo sentido advierten que "la danza es uno de los tantos aspectos olvidados y muchas veces enterrados a propósito, debería cobrar una importancia trascendental, y aquí en la provincia, muchos no lo ven como hecho artístico. Por supuesto que se necesita dinero, pero hay muchas otras formas de fomentar, por ejemplo, brindar espacios gratuitos para la práctica".
Por último, remarcaron: "Los artistas seguimos con la curiosidad y con ganas de desarrollar el talento siempre, a los que les falta esa curiosidad y talento, es a los funcionarios".