La población adulta con cuentas bancarias alcanzó al 91 por ciento de los individuos. Se trata de 31 millones de personas que poseían al menos una cuenta bancaria a finales del 2020. Así lo estimó el Banco Central a través de su último informe de Inclusión Financiera. Hubo una apertura récord de más de 5 millones de cuentas bancarias durante el segundo trimestre de 2020 impulsada principalmente por la acreditación de programas de ayuda social implementados para sostener los ingresos de los segmentos vulnerables de la sociedad.
La Argentina consiguió niveles de acceso a las cuentas bancarias equiparables a las economías desarrolladas. Esta tendencia se reforzó además con una política de impulso a los pagos electrónicos.
“Las transferencias electrónicas por adulto incrementaron su volumen un 90 por ciento en 2020, a través de la mayor canalización de operaciones por home banking (suba de 86 por ciento) y mobile banking (167 por ciento). A su vez, los pagos remotos con tarjetas de débito crecieron un 227 por ciento en el mismo periodo, ampliando su participación en 15 puntos porcentuales en el total de los pagos con dicho instrumento”, mencionó el informe del Central.
El relevamiento oficial muestra que hubo un cambio en el patrón de comportamiento de la población respecto del uso del efectivo: “En el año 2020, por cada 100 extracciones de efectivo por adulto, se efectuaron más del doble de operaciones por medios electrónicos de pago (222, un 19 por ciento más que en 2019), las cuales se descomponen en 110 con tarjeta de débito, 77 con tarjeta de crédito, 28 transferencias electrónicas y 7 con tarjetas prepagas”.
En conjunto con el fuerte crecimiento de las cuentas bancarias hubo un aumento importante de la apertura de cuentas no bancarias (billeteras de proveedores de servicios de pago). “Se registraron más de 8 millones de personas con al menos este tipo de instrumento a diciembre de 2020. La cifra equivale al 24 por ciento de la población adulta”. En detalle el efecto de la crisis sanitaria provocó, al igual que con las cuentas bancarias, un salto significativo en la tasa de variación durante el primer y segundo trimestre de 2020. Fue del 51 y 55 por ciento, igual a 1,2 y 2 millones de nuevos tenedores, respectivamente.
El documento del Banco Central resaltó además la aprobación del programa Pagos con Transferencia, que comenzó en diciembre de 2020 y continuará su implementación progresiva hasta noviembre de 2021. “Este esquema busca expandir el alcance de las transferencias inmediatas y se basa en un ecosistema digital de pagos abiertos interoperable (cuentas bancarias y no bancarias), inmediato y flexible (tarjetas, códigos QR, biometría)”, se indicó.
La apertura de cuentas con fines transaccionales vinculada con las políticas de derechos sociales dio lugar a una reducción en el ratio de plazos fijos respecto de dueños de las cuentas bancarias.