Facundo Campazzo cumplió otra buena tarea en los casi 33 minutos que permaneció en cancha, durante el partido que Denver Nuggets le ganó como visitante a Minnesota Timberwolves 114-103 en una nueva jornada de la NBA. El base argentino entregó 9 asistencias, consiguió 3 rebotes y convirtió 6 puntos, uno de ellos entre los gigantes del equipo contrario. Su actuación en el Target Center, de Minneápolis, fue elogiada por Ramón “Wanchope” Ábila, el exfutbolista de Boca que emigró a esa ciudad para jugar en el Minnesota United de la Major League Soccer y siguió el encuentro desde la platea del estadio.
Minnesota Timberwolves fue incapaz de controlar a Denver, y en especial a Nikola Jokic, quien dio una paso más para convertirse en el MVP, el jugador más valioso de la temporada, al conseguir un nuevo doble-doble con 31 puntos y 14 rebotes.
La victoria ante los Timberwolves permite a los Nuggets seguir con opciones de alcanzar el tercer puesto de la Conferencia Oeste, que actualmente ocupan los Los Angeles Clippers con 47 victorias, una más que Denver.
Campazzo tuvo un duelo particular con Ricky Rubio, base de los Timberwolves, que terminó prácticamente en empate. Ambos jugadores anotaron 6 puntos. El base español se hizo de 4 rebotes y dio 5 asistencias.
“Que cracks sos @facucampazzo”, celebró Ávila en Instagram el desempeño de Campazzo. Además de compartir su condición de deportistas, ambos son cordobeses.
El novato de los Timberwolves, Anthony Edwards, también aprovechó el partido del jueves para cimentar su candidatura a "rookie" del año con 29 puntos en su haber, 7 rebotes, 5 asistencias y 2 tapones. Edwards se ha convertido en el primer novato en la historia de los Wolves que anota más de 20 puntos en 34 partidos.
La superioridad de Denver empezó a vislumbrarse apenas comenzó el encuentro. En el primer cuarto, los Nuggets obtuvieron prácticamente el doble de rebotes que los Wolves (17 por 9). A un mayor control bajo los aros se unió la efectividad de Jokic, que terminó los primeros 12 minutos con 16 puntos.
Al final del primer cuarto, los Nuggets estaban ya 9 puntos por delante en el marcador, 26-35. En el segundo cuarto, Malone decidió darle un respiro a Jokic y sin el serbio en la cancha, los Wolves fueron capaces de equilibrar un poco los números.
D'Angelo Russell entró en funcionamiento y anotó 12 puntos para los Wolves. Aun así, al llegar al descanso, los Nuggets habían ampliado su ventaja a 11 puntos, 52-63, con 18 puntos en la primera mitad para Jokic. Mientras, en los Timberwolves, el más efectivo en los primeros 24 minutos era Russell, con 15 puntos, seguido del pívot Karl-Anthony Towns (KAT), con 11.
Tras el descanso, empezó el festival de Edwards. El novato, que se ha convertido en una pieza fundamental para los Wolves, suele actuar por rachas, que normalmente empiezan en el tercer cuarto. Y ante los Nuggets, Edwards no defraudó.
El alero de 19 años anotó en el tercer cuarto 18 puntos, con 3 triples de 4 intentados, y empujó a su equipo hasta hacerle soñar con dar la vuelta al marcador. La actuación de Edwards en el tercer cuarto eclipsó la de Jokic, que hizo 10 puntos en esos 12 minutos, y permitió que los Timberwolves anotasen 37 puntos por 29 de los Nuggets en el periodo. Once de los puntos de los Denver en el tercer cuarto los ejecutó el esloveno Vlatko Cancar, que acabaría el partido con 14 puntos, el récord en su carrera en la NBA.
El último cuarto se inició con los Wolves a sólo tres puntos, 89-92. Pero a los Wolves se les acabó el combustible. Sólo tres jugadores de Minesota anotaron en los últimos 12 minutos. Edwards hizo 4 puntos; KAT se quedó en 3; y sólo el segundo pívot del equipo, Naz Reid, brilló con 7 puntos.
En los Nuggets, Campazzo aprovechó la situación para anotar 4 puntos en el último cuarto, mientras que el suplente Markus Howard hizo otros 7. Y al final, Jokic fue demasiado para los Timberwolves.