En medio de la situación más crítica desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020, con números que alarman y exigen al máximo al sistema sanitario, Rosario reportó ayer 520 nuevos contagios sobre un total de 1.321 casos que se registró en todo el territorio santafesino. Al mismo tiempo, el Ministerio de Salud provincial informó el fallecimiento de 15 personas, de las cuales 3 eran oriundas de la ciudad. El sábado, el reporte oficial de la provincia notificó 2.356 nuevos casos.

Si bien el número de contagios es menor a los que se venían registrando en los últimos días debido a que durante los fines de semana decrece la cantidad de hisopados que se analizan en laboratorio, uno de los indicadores que más preocupa a las autoridades sanitarias es el de la capacidad de atención que tiene el sistema. Al igual que como ocurrió durante toda la semana pasada, ayer el nivel de ocupación de camas críticas se mantuvo muy alto, casi al límite, con un 98% de ocupación en el sector público y un 95% en el privado. “Quedan muy pocas camas libres en la ciudad”, confirmó un alto funcionario de la salud pública.

Rosario/12 publicó en su edición de ayer declaraciones del secretario de Salud Pública municipal, Leonardo Caruana, en las que advertía que si "el estrés sanitario sigue, no va a quedar otra opción desde lo sanitario que la aplicación de más restricciones".

 

Con este complejo contexto sanitario en la ciudad y en la provincia, una buena noticia es la inminente llegada de una nueva partida de vacunas que permitirán continuar con el plan de vacunación en Rosario y reanudarlo en aquellas ciudades en las que se había interrumpido la inoculación con primeras dosis por los pocos remanentes disponibles, como fue el caso de la capital provincial. De acuerdo a lo que informaron desde el Ministerio de Salud de Santa Fe, se espera que hoy lleguen a la provincia 39.000 nuevas dosis de Sputnik V, que son parte del medio millón de vacunas que ingresaron al país provenientes desde Moscú durante la madrugada del lunes pasado.