Con lo justo, Independiente superó 1-0 a Bahía de Brasil por la quinta fecha de la Copa Sudamericana y quedó en la cima del Grupo G. Thonny Anderson, en contra de su valla, señaló en el complemento el único tanto del encuentro disputado en Avellaneda. Con este resultado, el equipo de Julio César Falcioni quedó a un paso de clasificar a la próxima fase.
En medio de un desarrollo equilibrado, la formación visitante se mostró ligeramente más compacta en la primera etapa y creó las situaciones más claras para convertir en el arco defendido por Sebastián Sosa, el seguro guardavallas uruguayo.
El Rojo no llegaba con claridad al área de los brasileños, acaso porque le faltó la chispa necesaria. Poco después, una molestia muscular le impidió seguir a Lucas González, por lo que tuvo que salir en el entretiempo.
De regreso de los vestuarios, Independiente lució apagado, perdió la posesión de la pelota y sufrió bastante. Bahia lo arrinconaba y lo tenía contra las cuerdas, incluso le anularon un gol por offside.
Entonces Falcioni metió mano e hizo ingresar a Alan Velasco y Jonathan Menéndez, que le dieron otro aire al equipo y le cambiaron totalmente la cara.
Así, el local recién pudo desahogarse cerca del final, cuando Velasco ejecutó un tiro libre desde unos 35 metros, el arquero Douglas Friedrich y Anderson chocaron entre ellos, y el segundo terminó metiendo la pelota en contra de su valla.
Bahía mereció mejor suerte, pero Independiente -sin sobrarle nada- conservó la ventaja mínima y consiguió un triunfo imprescindible para pasar a los octavos de final.