Desde Santiago

Apenas minutos antes que el reloj marcara la medianoche del miércoles y con eso el límite legal de las inscripciones de las primarias presidenciales, la tensión entre la izquierda chilena no bajaba en las oficinas del Servicio Electoral Chileno (SERVEL) en pleno centro de Santiago. Finalmente, será Daniel Jadue (Partido Comunista) y Gabriel Boric (Revolución Democrática) quienes se enfrentarán en la primaria opositora que se efectuará el 18 de julio.

El primero, alcalde reelecto este fin de semana por la comuna de Recoleta, ha liderado hace dos años las encuestas gracias a un discurso bien articulado, centrado en lo social y los precios justos, implementando farmacias, ópticas e inmobiliarias populares. Arquitecto, con gran preparación territorial, autodeclarado feminista y laico, y de origen palestino, su figura es posiblemente el mayor liderazgo surgido en la izquierda chilena de la última década.

El segundo, uno de los rostros del Frente Amplio, conglomerado de partidos surgidos tras las grandes movilizaciones estudiantiles de 2011. De gran liderazgo generacional, preparado intelectualmente, contradictorio a ratos (había señalado insistentemente que no sería candidato), fue uno de los líderes del Acuerdo por la Paz de noviembre de 2019 que, tras un mes del “Estallido Social” decretó el inicio del proceso constituyente. Aunque también para muchos, esto salvó al presidente Sebastián Piñera de una eventual destitución. De hecho, el mismo PC se restó del proceso.

El acuerdo con el PS que no fue

Cinco horas antes el escenario era otro: PC y FA estaban llegando a un acuerdo con el Partido Socialista para competir entre sí para elegir un candidato que compita en las presidenciales del 21 de noviembre. Un escenario donde Joaquín Lavín (Unión Demócrata Independiente, de origen pinochetista), reelecto el fin de semana como alcalde de la pudiente comuna de Las Condes, emerge como la gran carta derechista. Las primarias del oficialismo —partidos agrupados bajo el nombre de Chile Vamos—, que se realizarán en la misma fecha, también incluirán al exministro de Hacienda (e insistente opositor al retiro del 10% de las AFP), Ignacio Briones de Evolución Política (EVOPOLI), el exministro de defensa Mario Desbordes (Renovación Nacional) y el ex ministro del interior y Sebastián Sichel (independiente). Por otro lado, el ultraderechista José Antonio Kast (Partido Republicano) ha confirmado su candidatura presidencial, pero no participará en las primarias. .

Las señales despejaban el camino: precandidatos como Pablo Vidal (Nuevo Trato) y el experimentado Heraldo Muñoz (Partido Por la Democracia, PPD) depusieron sus candidaturas para favorecer a Paula Narváez (PS), exministra de los dos gobiernos de Michelle Bachelet y que hasta hace unos meses trabajaba con ella en la ONU, siendo apoyada explícitamente por la expresidenta.

Todo esto, mientras la DC experimentaba un terremoto tras la renuncia de su presidente Fuad Chahin y la bajada de la candidatura de la senadora y exministra de Bachelet, Ximena Rincón. Todo esto como consecuencia directa de la derrota de la centroizquierda tras la megalección del fin de semana pasada, donde independientes de izquierda, el Frente Amplio y el Partido Comunista resultaron los grandes ganadores de alcaldías, gobernadores regionales y convencionales constituyentes.

Curiosamente, en medio de la crisis, Muñoz, rostro de un partido nacido para reunir distintas tendencias opositoras a Pinochet para el plebiscito de 1989 y que tuvo mucho poder durante la Transición, incluso se dio el tiempo para lamentar el cierre del popular restaurante El Hoyo —famoso por el trago “terremoto” y su gastronomía rural— donde había anunciado su candidatura en octubre del año pasado.


El audio filtrado

Algo más delicado fue la “filtración” de un audio, donde Rincón denunciaba que éste junto al presidente del PS, Álvaro Elizalde, de todas formas, no irían a una primaria si ella sigue siendo candidata. “Eso se llama veto y bullyng. Luego ni conversan con mi partido (DC) y hacen el intento de ir con el PC y el FA y ahora van corriendo a la DC (…). Estamos perdiendo dignidad”. Como si fuera poco para Rincón, también se supo que se le pidió a la actual presidenta del senado y la figura mejor posicionada del partido, Yasna Provoste para candidatearse a lo que ella respondió, en su clásico estilo que “siempre ha estado disponible por el bien del partido y de Chile a enfrentar desafíos”.

Según diversas fuentes que estuvieron toda la jornada en el SERVEL el plan del PS era alejarse del centrismo de la DC, tras 30 años de alianza y acercarse a la izquierda “ganadora” de las megalecciones del reciente sábado y domingo. Tras una hora de reunión entre Elizalde y dirigentes del PC y FA, los políticos de Revolución Democrática y el movimiento UNIR del diputado y exministro de Bachelet, Marcelo Díaz se mostraron contrarios a la participación de Muñoz, que se reintegraría a la primaria, considerando las tensiones que había tenido en las últimas semanas con Jadue por la estructura de la primaria. Pero la gota que habría rebalsado el vaso fueron los intentos del PS de comprometer cupos para senadores y diputados de ese partido junto al PPD. Es decir, la misma cocina política que caracterizó a la gtransición y que los nuevos movimientos sociales han cuestionado.

Así, la telenovela terminó con el enojo de Narváez, que tendría que competir en un contexto mucho más favorable para Jadue y Boric, al punto de acusar “veto” y que “no garantizan gobernabilidad para Chile”. El partido Revolución Democrática —perteneciente al Frente Amplio— también quedó resentido con el partido de Boric por excluir a Narváez. “No es tiempo de exclusiones, tenemos la oportunidad de transformar Chile y construir mayoría, que sea el pueblo que decida”, señaló en redes sociales su presidenta Catalina Pérez. De todas formas, el cierre de inscripciones será el 24 de agosto y aún se esperan sorpresas.

Un derrotado Elizalde dijo una frase de antología tras las reuniones fallidas: ““Hoy, cuando se han hecho llamados a la unidad en los momentos de las definiciones, se nos informa un veto para determinadas fuerzas políticas que apoyan la candidatura de Paula Narváez. Esto es vergonzoso, nos parece lamentable. No se humilla al partido de Salvador Allende”.