Las vacilantes esperanzas de un alto el fuego en el último conflicto entre Israel y Hamas, uno de los más violentos de los últimos años, se han fortalecido con señales de que la muerte y la destrucción podrían estar llegando a su fin en medio de la presión internacional.
El ejército israelí llevó a cabo alrededor de 15 ataques en Gaza temprano por la mañana del jueves, y Hamas respondió con el lanzamiento de cohetes. Pero esto fue seguido por un largo cese de la acción militar, con la excepción de incidentes aislados.
La aceleración hacia una posible tregua se produjo después de que Joe Biden le dijera el miércoles al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que quería "una desescalada significativa en el camino hacia un alto el fuego". El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden se había enfrentado a críticas, incluso de su propio Partido Demócrata, por no hablar, ya que el número de muertos ha seguido aumentando.
Estados Unidos bloqueó el miércoles un proyecto de resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que pedía un alto el fuego. Era la quinta vez que impedía que el Consejo emitía una declaración pidiendo el fin de las hostilidades, mientras Washington sostenía que obstaculizaría sus propios intentos de poner fin a la contienda.
Los funcionarios estadounidenses insistieron en que esto no era solo retórica y que se habían involucrado activa y afanosamente entre bastidores. La llamada telefónica entre Biden y Netanyahu, señalaron, fue la cuarta en una semana.
Como parte de la campaña internacional por un alto el fuego, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas, debía reunirse con líderes palestinos e israelíes en Ramalá y Jerusalén el jueves. El enviado de la ONU para Oriente Medio, Tor Wennesland, se había reunido con el líder de Hamas, Ismail Haniyeh, en Qatar el miércoles.
El primer indicio público de un avance se produjo después de que Moussa Abu Marzouk, vicepresidente del buró político de Hamas, dijera que los "esfuerzos en curso" estaban cerca del éxito. "Espero que se alcance un alto el fuego en uno o dos días, y el alto el fuego se basará en un acuerdo mutuo", dijo a al-Mayadeen TV en el Líbano.
Netanyahu ha dicho que estaba "decidido a continuar" hasta que "se restablezca la calma y la seguridad para los ciudadanos israelíes". Y el ministro de inteligencia israelí, Eli Cohen, desestimó los informes de un alto el fuego antes del fin de semana y sostuvo que “terminaremos la operación cuando hayamos decidido que hemos alcanzado todos nuestros objetivos”.
The Wall Street Journal informó que los involucrados en las negociaciones creen que la tregua definitiva se puede consolidar este fin de semana. Un ex alto funcionario de seguridad israelí dijo a The Independent: “Creo que hemos logrado en gran medida nuestro objetivo militar dentro de los parámetros generales - y eran bastante amplios – que nos dio el gabinete de seguridad, es una decisión política ahora y la sensación es que probablemente se llevará a cabo un alto el fuego, pero hay algunos problemas por resolver ".
Se cree que entre los temas en discusión está la demanda de Hamas de que Israel cese los asesinatos selectivos de los comandantes de Hamas y los israelíes exigiendo que Hamas deje de construir sus túneles subterráneos, detenga los ataques con cohetes y las manifestaciones en la frontera. También se estaría debatiendo el regreso de dos civiles israelíes retenidos por Hamas y la repatriación de los cuerpos de dos soldados israelíes. A más largo plazo, se le pide a Israel que facilite el suministro de bienes a Gaza y que afloje las restricciones comerciales.
Las fuerzas israelíes han llevado a cabo regularmente campañas de "decapitación" contra Hamas en Gaza, y esto también ha sido un tema central en el conflicto actual. Los funcionarios egipcios, que actúan como mediadores, dijeron que han tenido dificultades para ponerse en contacto con los líderes de Hamas porque se habían refugiado bajo tierra y no se les podía localizar en sus teléfonos celulares.
La última ronda de ataques aéreos el jueves incluyó el objetivo de una casa en el área de Khan Younis. El gobierno israelí afirmó que había "infraestructura militar" ubicada cerca del edificio.
Los funcionarios israelíes se negaron a comentar sobre las afirmaciones de que algunos de los últimos ataques fueron un "último intento" de eliminar a Mohammed Deif, el comandante militar de Hamas, de Khan Younis, que ha escapado de varios intentos de matarlo. Sin embargo, el miércoles, el general de brigada Hidai Zilberman, portavoz de las FDI, dijo que “durante toda la operación hemos intentado asesinar a Mohammed Deif”.
El comandante de Hamas, un antiguo adversario de Israel, ha sido un objetivo frecuente. Los intentos de asesinarlo incluyeron el bombardeo de su casa en el distrito de Sheikh Radwan de Gaza durante el conflicto de 2014. Una de sus esposas, Widad, de 28 años, y su hijo pequeño, Ali, murieron en el ataque.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, más de 230 palestinos han muerto desde el inicio del conflicto, incluidas más de cien mujeres y niños. El ejército israelí dice que 150 de los muertos eran combatientes. Los ataques con cohetes de Hamas han matado a más de una docena de personas en Israel, incluidos dos niños.
De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Páginal12
Tradcción: Celita Doyhambéhère