Finalmente se cumplieron todas las etapas para normalizar el Instituto Provincial de Pueblos Indígenas de Salta (IPPIS) y de esa manera superar los dos años de intervención parcial que sobrellevó ese organismo provincial en el que participan los nueve pueblos reconocidos oficialmente por las autoridades locales.
El proceso electoral comenzó el 3 abril con la elección de representantes en cada comunidad y siguió el 8 de mayo con la elección de vocales que se realizó en Salta Capital para los pueblos Kolla y Diaguita Calchaquí, y en la ciudad de Tartagal para los pueblos Chané, Wichí, Qom, Chulupi, Guaraní, Tapiete y Chorote. Y el viernes último culminó con la asunción de sus nueve vocales, quienes en reunión de Consejo Directivo eligieron a su próximo presidente cumplimiento con lo dispuesto por la ley provincial 7.121 que regula el funcionamiento de la institución y la define como entidad autárquica y descentralizada.
Tras una serie de reuniones en la Casa de Gobierno del Grand Bourg, en donde se encontraron con el gobernador Gustavo Sáenz minutos antes de que éste firme el decreto 417 reconociendo la validez de las elecciones y a los vocales elegidos, la ministra de Desarrollo Social, Verónica Figueroa, presidió el acto de asunción de los nueve representantes.
Una vez asumidos en sus cargos, los vocales se aprestaron a elegir a su presidente, que como la normativa lo especifica, debía surgir de los pueblos Chané o Diaguita Calchaquí. La ley detalla que la presidencia del IPPIS debe ser rotativa. En la reunión, la mayoría, compuesta por casi todos los pueblos del norte provincial, eligieron a Osvaldo Araya por los próximos dos años, por lo que las comunidades diaguitas deberán esperar hasta el 2023.
“Lo primero que queremos hacer es salir en equipo a territorio a ver las necesidades de nuestras comunidades y desde ahí armaremos nuestro plan de trabajo”, dijo Araya al finalizar el acto, pero resaltó que para ello tendrán que ver con qué se encuentran y el estado de las cuentas de ese Instituto. “Esperemos poder comenzar a trabajar en un camino común con el gobernador”, añadió, al recordar que el mandatario los había recibido por la mañana en la casa de gobierno.
Las cuentas del IPPIS
En diálogo con Salta/12, quien pretendía llegar a la presidencia pero quedó en minoría, solo con el apoyo de los vocales kolla y chorote, Cándido "Huayra" Condorí, contó que la decisión de elegir al representante chané, ya venía acordada desde las elecciones del 8 de mayo en Tartagal por parte de las comunidades del norte provincial. Pero aclaró que acompañarán la gestión y esperan ser escuchados como parte de los pueblos que integran el Consejo Directivo.
Kollas y diaguitas habitan en la zona de los Valles y la Puna salteña, en las tierras altas. El Pueblo Chané es del territorio bajo, en la zona del Chaco salteño, donde residen también los otros pueblos reconocidos por la provincia.
Condorí fue crítico con el gobierno provincial, ya que dijo que ningún funcionario les pudo dar certezas del organismo que recibirán, y aseguró que “faltan herramientas para gestionar”, como la posibilidad de contar con vehículos para viajar “y visitar todas las comunidades de la provincia”.
“No vemos que estén a disposición, no hay voluntad del Estado y tampoco vemos con claridad cuál será el presupuesto con el que podemos contar”, explicó el diaguita, para quien “con la voluntad sola no alcanza, y presidir el espacio no va a ser fácil”.
Condorí sostuvo que habló con el nuevo presidente del IPPIS y espera que haya apertura para todos los pueblos en su gestión. “Esperamos que nos escuchen y la vamos a pelear dentro del Consejo”, concluyó.
En el mismo sentido giraron las palabras del representante kolla, Faustino Peloc. También él afirmó que “los hermanos del norte ya habían decidido” el nombre del nuevo presidente, y que tampoco lograron que la vicepresidencia quede en manos diaguita o kolla. Pero confió en que serán equitativos con todos los pueblos.
Luego reconoció que la imagen del pueblo que representa quedó muy deteriorada por su antecesor, Miguel Siarez, y que eso le puede haber jugado en contra a la hora de elegir internamente a sus autoridades.
Pelloc, como su par diaguita, acentuó que la predisposición de los integrantes del Consejo es trabajar con las organizaciones y con cada pueblo de la provincia, pero anticipó que eso será difícil debido a que aún no tienen en claro cuál será el presupuesto con el que contarán y con qué instrumentos se valdrán para realizar sus labores.
El Consejo Directivo
La comisión directiva encabezada por Araya quedó integrada por Enrique Arello, del Pueblo Guaraní, en la vicepresidencia; José Rodríguez, del Pueblo Wichí, en la tesorería; protesorero será Franco Bravo, del Pueblo Chulupí; el secretario será Ernesto Killo, Tapiete, y el prosecretario Deni Sosa, del Pueblo Qom. La comisión se completa con los vocales Cándido Condorí (Diaguita Calchaquí), Cornelio Soruco (Chorote) y Faustino Peloc (Kolla).
El próximo miércoles se debía reunir el Consejo Directivo para inventariar con escribano público todo lo que reciben en esa institución, pero debido a las nuevas restricciones de circulación aún no saben si podrán hacerlo ya que muchos de ellos ya se encuentran en sus comunidades.
Cinco pueblos aún luchan por ser reconocidos y poder tener sus representantes en en la conducción del IPPIS: Lule, Atacama, Tastil, Iogys y Weenhayek. Para este fin hay un proyecto de ley con media sanción en el Senado pero que espera el tratamiento en la Cámara de Diputados.