El Consejo de Derechos Humanos de la ONU votó a favor de la apertura de una investigación sobre posibles violaciones de los derechos humanos en Israel y en los territorios palestinos tras la reciente escalada bélica en la Franja de Gaza. La resolución registró un hito al otorgarle un mandato indefinido a la comisión de expertos que estará a cargo de la investigación y promueve un estudio de "todas las causas profundas de las tensiones recurrentes".
La resolución fue aprobada con 24 votos a favor sobre un total de 47 miembros del Consejo, entre ellos el voto favorable de la Argentina, China y Rusia, mientras que países como Brasil, Italia, Japón, Francia y Holanda se abstuvieron. Estados Unidos se retiró del Consejo en la gestión Donald Trump y, por el momento, participa como veedor desde la asunción de Joe Biden.
La aprobación de la investigación fue calificada como una "decisión vergonzosa" por parte del gobierno israelí de Benjamin Netanyahu, quien acusó al Consejo de Derechos Humanos de la ONU de tener una posición "antiisraelí".
El movimiento Hamas, que inició los ataques el último 10 de mayo luego de la amenaza de desalojos forzosos de ciudadanos palestinos en Jerusalén, saludó la apertura de la investigación indefinida, mientras que la Autoridad Palestina la calificó de "paso hacia adelante" para la protección de los derechos humanos de los palestinos.
"Si resulta que el impacto sufrido por civiles y bienes materiales civiles ha sido indiscriminado y desproporcionado, este ataque podría constituir un crimen de guerra", había advertido previamente la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, en la apertura de la sesión extraordinaria.
"Un impunidad antigua y sistemática"
El documento del Consejo de Derechos Humanos señaló que la nueva escalada bélica en la Franja de Gaza, la cuarta registrada desde 2008, surge como consecuencia de que se han socavado "todos los esfuerzos para llegar a una solución justa y pacífica" durante años. Es la primera vez que el Consejo establece una comisión de investigación con un mandato indefinido a diferencia de otras comisiones de investigación, como la de Siria, que debe renovarse cada año.
La resolución pide que la comisión internacional de expertos estudie "cómo la discriminación y la represión sistemática basadas en la identidad nacional, étnica, racial o religiosa" atentan contra una posible solución ante lo que se calificó como una "impunidad antigua y sistemática".
El conflicto entre Israel y Hamas, en el poder en Gaza, se inició con el lanzamiento de cohetes por parte de Hamas hacia el territorio israelí, a los que el país gobernado por el conservador Netanyahu respondió bombardeando Gaza.
El inicio de los ataques por parte Hamas tuvo como detonante los enfrentamientos en la Explanada de las Mezquitas, en Jerusalén Este, zona ocupada por Israel, que estallaron por la amenaza de desalojo de familias palestinas de la parte oriental de la ciudad, en beneficio de los colonos israelíes.
Bachelet denunció las consecuencias humanitarias de la escalada bélica
Durante la sesión extraordinaria del Consejo, Bachelet señaló que los ataques provocaron "numerosos muertos y heridos entre los civiles y generaron destrucción y daños materiales a gran escala en bienes civiles". "Pese a las afirmaciones de Israel que asegura que numerosos de estos edificios acogían a grupos armados o eran usados con fines militares, no hemos visto pruebas al respecto", señaló Bachelet.
"Esta escalada está directamente relacionada con las protestas y la dura respuesta de las fuerzas de seguridad israelíes", lamentó la comisionada, quien agregó que los disparos de cohetes de Hamas "son indiscriminados y no distinguen entre objetivos militares y civiles, por lo que su uso es una clara violación del derecho internacional humanitario".
Las posiciones de Israel y Palestina
Entre el 10 y el 21 de mayo, 254 palestinos murieron en los bombardeos israelíes en Gaza, entre ellos 66 niños y también milicianos. En Israel, los cohetes lanzados desde la Franja mataron a 12 personas.
La reunión del Consejo se celebró a petición de Pakistán, que coordina la Organización de la Cooperación Islámica, y de las autoridades palestinas. La investigación se centrará en recabar pruebas y elementos que podrían ser utilizados en el marco de la apertura de diligencias judiciales y, en la medida de lo posible, identificar a los culpables para que puedan ser juzgados.
El ministro de Relaciones Exteriores palestino, Riyad al Maliki, participó en la reunión a distancia y acusó a Israel de haber instaurado un "régimen de apartheid basado en la opresión del pueblo palestino" y su "desplazamiento forzado".También reivindicó el derecho de los palestinos de "resistir ante la ocupación" y dijo que los "colonos (israelíes) tendrían que estar en la lista de terroristas".
La embajadora de Israel ante Naciones Unidas en Ginebra, Meirav Eilon Shahar, acusó a Hamas de haber iniciado el conflicto y aseguró que su país hizo todo lo posible para "rebajar las tensiones". La embajadora de Israel consideró que esta sesión demuestra que la institución es "antiisraelí".