El joven diseñador catamarqueño, que reparte su vida profesional entre Buenos Aires e Italia, forma parte de los artistas que exponen en el Pabellón Argentino de la Bienal de Diseño de Londres 2021, que se desarrollará desde el martes 1 hasta el 27 de junio, en el histórico edificio Somerset House, en Londres.

A la orilla del Támesis, en lo que fue una antigua residencia de los Tudor y reconstruida en el siglo XVIII, donde entre otros hechos históricos, se firmó en 1604 el tratado de paz con España, y desde donde se dirigían las operaciones bélicas en la Segunda Guerra Mundial; allí, en la orilla del Támesis, en el Somerset House, que con una inversión de 48 millones de libras pasó a ser uno de los centros culturales más importantes; allí no más, unos yuyos de los valles calchaquíes interrumpirán esa historia monárquica, para dar cuenta de un estar y de un sentir del noroeste argentino.

El proyecto Monte Abierto, del diseñador Cristián Mohaded junto al artesano Lorenzo Reyes, propone un universo sensorial de texturas y colores a partir del trabajo con el simbol, una planta típica de los valles calchaquíes catamarqueños. En Tinogasta, Belén, Santa María, Fiambalá existe una larga tradición de cestería con la paja del simbol.

Cristián Mohaded.

Hace una década, luego de que Mohaded se graduara en la universidad de Córdoba de diseñador industrial, conoció a Lorenzo Reyes, artesano de la cestería. “Desde entonces mantienen una colaboración experimental construida sobre la producción de acuerdos, un lenguaje común y pactos de respeto entre ellos, el simbol y el monte”, según lo define la curadora de la muestra, Franca López Barbera.

Nacido en la localidad Recreo, a 200 km al sudeste de la capital provincial, Mohaded recordó en su charla con Catamarca/12, la relación de la vivencia de su infancia con el universo creador que hoy despliega por el mundo, a la vez que señala la necesidad de valorar más la artesanía del país.

“Estudié diseño industrial en la universidad de Córdoba, fui encontrándome con maneras de hacer y uno va generando el propio mundo. Obviamente nací en Recreo y mi formación y mi vida cuando era chico estuve rodeado de cosas muy simples, en mi casa había un simbol, mi mamá hacía cosas para arreglar la casa, ni abuela pintaba tablas, alrededor mío estaban estas cosas que a uno lo van impregnando, lo que uno mama cuando chico y cuando me fui profesionalizando fui investigando”, relató.

-¿Cómo es combinar dos universos que parecen lejanos, el industrial y el artesanal?

-Mi formación es diseñador industrial y siempre sentí que la industria no está al alcance, que no hay acceso, porque prácticamente no hay industrias que contenga a los diseñadores donde puedan desarrollarse. Y el condimento de la parte artesanal se subestima como también se subestima la parte industrial. Hay países que han invertido mucho en la parte industrial y en el diseño para salir a flote, como Francia, Australia, aquí en Inglaterra la artesanía es casi un lujo, en el mundo la artesanía es casi un lujo y nosotros todavía estamos sin entender eso, sin tomarla en serio.

Aquí en Londres hay una semana de la artesanía donde se hacen preventas, donde participan artesanos de toda Inglaterra, es un evento muy prestigioso en el que se invierte muchísimo. Nosotros no tenemos eso, pensamos que no tiene fortaleza para la economía, creo que mi trabajo justamente trata de visibilizar eso y poner sobre la mesa este tipo de valores. Me gusta, me apasiona, siento que la gente tiene que entender todo lo que tenemos, hablo a nivel federal, artesanos de Jujuy, Salta, Buenos Aires, Córdoba, no solamente en Catamarca. Y en todos lados pasa lo mismo. No podemos percibir todo lo que podemos hacer con nuestros artesanos, y también me refiero a todos los materiales que tenemos dentro de los territorios. Cuando digo territorio estoy hablando de cultura y cuando digo cultura estoy hablando de historia, un conjunto de cosas que nos estamos perdiendo porque no nos enseñaron a entender la artesanía con el valor que tiene.

-¿Por qué el simbol?

Me gustan las texturas, el color, la simpleza del material, es muy noble, frágil pero al mismo tiempo tiene estructura y va cambiando de color a medida que pasa el tiempo. Hay cosas que uno las siente y me gusta también poder darle este otro lugar, que por ahí es un yuyo, y me parece que es más fácil darle valor a un poncho porque viene de un animal, de una vicuña, pero un yuyo es más difícil y mucho más arriesgado darle una potencia.

Los materiales tienen que tener las mismas posibilidades, no se trata si tienen más pureza o menos, como las piedras que algunas son preciosas, para mí los materiales tienen que ver con con su alma en sí. No me gusta utilizar los materiales porque tengan un valor percibido en la sociedad. Me parece que los materiales de por sí, ya tienen valor por sí solo.

-¿Después de la Bienal?

-Estoy trabajando con diferentes proyectos a nivel nacional, con empresas de muebles, y trabajando en mi propia muestra en octubre Museo Nacional de Arte Decorativo, con una intervención de unos veinte artesanos a nivel federal.


Bienal de Diseño de Londres

Es uno de los principales escenarios para exhibir lo más destacado del diseño a nivel mundial en innovación e investigación de esta disciplina. Para su tercera edición, la directora artística, Es Devlin, ha elegido como tema la Resonancia que considera las consecuencias tanto estimulantes como devastadoras del diseño con respecto a la forma en que vivimos y en las decisiones que tomamos.

Veintiséis representantes de diversos países, ciudades y territorios de los seis continentes tomarán Somerset House respondiendo al tópico a través de sus instalaciones. El Comité Asesor y el Jurado Internacional de la Bienal de Diseño de Londres, compuesto por destacados expertos creativos, otorgará cuatro medallas a las contribuciones más significativas de los países participantes.