El Gobierno de China anunció su decisión de habilitar a las familias del país a que tengan tres hijes, elevando así el límite de dos aún vigente. La decisión se toma por el creciente envejecimiento poblacional.
Según reportó la agencia de prensa pública Xinhua, la medida tiene lugar semanas después de la publicación de los resultados del último censo, que dejó en evidencia una fuerte baja de la tasa de natalidad en el país más poblado del mundo.
Como respuesta al envejecimiento de la población, la agencia de noticias informó que “las parejas serán autorizadas a tener tres hijes", citando las conclusiones de una reunión del buró político del Partido Comunista encabezada por el presidente Xi Jinping.
Los resultados del censo realizado en 2020 se conocieron a principios de mayo y revelaron un envejecimiento de la población más rápido del esperado: durante el primer año de la pandemia el número de nacimientos cayó a 12 millones, contra 14,65 millones en 2019.
En 2019 la tasa de natalidad (10,48 por 1.000) ya estaba en el nivel más bajo desde la fundación de la China comunista en 1949.
La política de un solo hije
Durante 30 años, el Gobierno chino mantuvo la política de un solo hije para controlar el crecimiento de su población. El documental One Child Nation (2019), dirigido por Nanfu Wang y Jialing Zhang, analiza las consecuencias de esta medida implementada entre 1979 y 2015.
Sin embargo, el hecho de elevar el límite de hijes a dos no fue suficiente ya que la tasa de natalidad se ve afectada por otros factores: la disminución de los los matrimonios, el aumento del costo de la vivienda y la educación y, además, que las mujeres eligen maternar de forma tardía al privilegiar su carrera profesional.
A la baja de la natalidad se suma que el año pasado China tenía más de 264 millones de personas mayores de 60 años el año pasado. El grupo de los mayores de 60 años constituye ahora el 18,7 por ciento del total de la población, un aumento de 5,44 puntos porcentuales respecto al censo de 2010.
Por el contrario, la población en edad de trabajar (15 a 59 años) no representa más del 63,35 por ciento del total, 6,79 puntos menos que hace 10 años.
En marzo, el parlamento chino votó un plan para aumentar gradualmente la edad de jubilación durante los próximos cinco años. La medida causó disgusto en gran parte de la población.