Pedro Fragueiro, quien se desempeñaba como juez de Familia y Violencia Familiar en Misiones, fue destituido por actos “indebidos, impropios e indignos”, luego de recibir –desde 2017— seis denuncias por acoso y abuso sexual contra jóvenes mujeres. Los hechos ocurrieron en los lugares donde ejercía sus funciones, en las ciudades de Puerto Iguazú y Oberá, cuando era directivo de un club de rugby, e incluso en su propia casa, en perjuicio de la niñera de una hijastra suya. Lo destituyó, por voto unánime, un jury de enjuiciamiento.

Luego de rechazar todas las nulidades planteadas por la defensa del imputado, el jury consideró, tras analizar el caso “con perspectiva de género”, que Fragueiro debía ser sancionado por “falta de cumplimiento de los deberes a su cargo”. El primer voto fue de la presidenta del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial de Misiones, Rosanna Pía Venchiarutti Sartori, titular del Superior Tribunal de Justicia.

La presidenta del jury aseguró que el ahora ex juez “aprovechaba la vulnerabilidad de las denunciantes, generando temor en ellas por su condición de magistrado”. En ese marco, los hechos “implican una cuestión de poder; él generaba la impotencia de las víctimas y ellas se sentían avergonzadas y con miedo, incluso una de ellas se sintió culpable de no haberlo denunciado antes”.

Agregó que Fragueiro “ha traicionado la confianza que el pueblo de Misiones puso en él” y luego se preguntó: “¿Cómo el pueblo misionero puede seguir confiando en que vele por sus derechos? Ha deshonrado su investidura”, concluyó.

El voto fue acompañado por los restantes miembros del jury: los ministros Cristian Marcelo Benítez y Froilán Zarza; los diputados provinciales Ana Azul Centeno y Gustavo González, y los abogados Miguel Ángel Insaurralde y Julio César González Genes.

Fragueiro, quien no estuvo presente en ninguna de las jornadas del jury, fue representado por su abogada, Myriam Adriana Gauvry. Por la parte acusadora intervino el procurador general de la provincia, Miguel Ángel Piñero. Todos coincidieron que el hostigamiento a las víctimas siempre fue “con fines sexuales” y que los actos fueron “indebidos, impropios e indignos”.

La primera denuncia contra Fragueiro fue presentada en 2017 por una joven ante la Fiscalía 3 de Puerto Iguazú. La denunciante intentaba ser árbitro de rugby y el ex magistrado la acosó cuando él se desempeñaba como responsable del área en la Unión de Rugby de Misiones.

La segunda denuncia fue de una joven de 23 años, estudiante de la carrera de Derecho, que había entrado a trabajar en el Juzgado de Familia y Violencia Familiar N° 2 de Puerto Iguazú, que fue el último destino ejercido por Fragueiro.

La tercera denuncia fue de una mujer que realizaba un trámite en el juzgado de Fragueiro. La mujer fue acosada durante una de las entrevistas. El cuarto caso es el de una empleada del Juzgado Civil y Comercial N° 2 de Oberá, donde también estuvo Fragueiro. Esta acusación fue por “acoso y abuso”.

La quinta denuncia fue de una mujer de 35 años. El último de los casos analizados en el jury, quedó registrado en la Fiscalía de Instrucción 3 de Posadas. La víctima relató que los abusos los padeció cuando tenía 20 años y trabajaba como niñera de las hijastras del juez destituido. Los hechos ocurrieron en la casa en la que el imputado vivía con su pareja.

El 5 de mayo pasado, el Superior Tribunal de Justicia de Misiones había suspendido por 15 días a Fregueiro, dad la repercusión pública de las denuncias. Como la situación era ya insostenible, el magistrado se vio obligado a presentar su “renuncia indeclinable” al cargo, ante el gobernador Oscar Herrera Ahuad. Su intención fue la de intentar desactivar el jury en su contra, pero no pudo lograrlo. Ya afrontaba dos pedidos de jury, presentados por por el diputado provincial Rafael Pereyra Pigerl, y por Fernando Orbe y Valeria Soczyuk, del Colegio de Abogados de Misiones. El jurado de enjuiciamiento recibió el testimonio de 25 personas.