La Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó este martes la vacuna contra el coronavirus de la farmacéutica Sinovac (CoronaVac) para su uso de emergencia, al asegurar que la fórmula cumple las normas internacionales de seguridad, eficacia y fabricación. Se trata del segundo inyectable chino que recibe la autorización del organismo. El primero fue Sinopharm, que se administra en Argentina.
Sobre la base de las pruebas científicas disponibles, la OMS recomendó el uso de la vacuna en adultos de 18 años o más, en un esquema de dos dosis con un intervalo de dos a cuatro semanas. También confirmó su eficacia, dado que los resultados mostraron que la vacuna previno la enfermedad sintomática en el 51 por ciento de los vacunados y evitó la covid-19 grave y la hospitalización en el 100 por cien de la población estudiada.
Aunque en los ensayos clínicos se inscribieron pocas personas de más de 60 años, por lo que no se pudo estimar la eficacia en este grupo etario, la OMS no recomendó imponer un límite de edad para su aplicación entre los adultos mayores, ya que los datos recogidos durante su uso posterior en múltiples regiones--la fórmula se está administrando de forma masiva en unos 22 países, incluyendo a Chile y Brasil-- y los datos de inmunogenicidad de apoyo sugieren que "es probable que la vacuna tenga un efecto protector en las personas mayores".
"No hay motivos para creer que la vacuna tenga un perfil de seguridad diferente en poblaciones de más edad y más jóvenes", señaló la OMS. En todo caso, aclaró el organismo, se aconseja que los países que utilicen la vacuna en grupos de mayor edad realicen un seguimiento de la seguridad y la eficacia para verificar el impacto esperado y contribuir a que la recomendación sea más sólida para todos los países.
La evaluación de la OMS incluyó inspecciones de las instalaciones de producción en China. "Sus requisitos de fácil almacenamiento la hacen muy manejable y especialmente adecuada para entornos de bajos recursos", destacó el organismo sanitario en un comunicado.
La lista de uso de emergencia de la OMS es un requisito previo para el suministro de vacunas al Covax y la adquisición internacional. También permite a los países acelerar su propia aprobación reglamentaria para importar y administrar las vacunas contra el coronavirus. Además de los fármacos de Sinovac y Sinopharm, integran esa lista la fórmula de Moderna, la de Pfizer/BioNTech, la de Johnson&Johnson y las dos vacunas AstraZeneca, la fabricada en India (llamada Covishield, que también se usa en Argentina) y la que desarrolla en Corea del Sur.
"El mundo necesita desesperadamente múltiples vacunas para hacer frente a la enorme desigualdad de acceso en todo el planeta. Instamos a los fabricantes a participar en el mecanismo Covax", expresó la subdirectora general de la OMS para el Acceso a los Productos Sanitarios, Mariângela Simão, en referencia al instrumento que garantiza la distribución a países de ingresos bajos y medios.