El presidente de la comisión del senado que investiga el accionar del gobierno de Jair Bolsonaro frente a la pandemia de covid-19, Omar Aziz, dijo que ya cuentan pruebas de que el gobierno actuó de forma deliberada a través de un gabinete paralelo para retrasar la compra de vacunas.
"Ya tenemos suficientes evidencias de que Brasil no quiso comprar vacunas", dijo Aziz, senador por el conservador Partido Social Democrático (PSD), que actualmente preside la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI). Integrada por 11 senadores (de los cuales siete son opositores al gobierno), la comisión lleva un mes recabando información sobre la gestión de la lucha contra el coronavirus en el país, incluyendo los testimonios de los ministros de Salud que ocuparon el cargo desde que comenzó la pandemia.
Según confirmó Aziz al diario brasileño Estadão, la CPI ya puede dar parte a la Fiscalía para que inicie los trámites para procesar a los funcionarios responsables. Para Aziz es imposible desligar al presidente Jair Bolsonaro de las responsabilidades.
Por otra parte, el senador también se refirió al gabinete paralelo con el que contaba Bolsonaro para tomar decisiones respecto a la pandemia. "Se reunió mucho más con el 'gabinete paralelo' que con el ministro de Salud", afirmó el presidente de la CPI. Esto último también fue confirmado por los mismos extitulares de la cartera de Salud, como el exministro Luiz Henrique Mandetta, que en su declaración ante la CPI afirmó que Bolsonaro contaba con asesoramiento externo. Algo que también fue confirmado por el exministro de Salud, el general Eduardo Pazuello, según recordó Aziz a Estadao. “Se acuerdan que Pazuello dijo que se reunía con el presidente una vez por semana, quizá cada 15 días. No se reunía con el ministro pero con el gabinete paralelo se reunía a diario”.
El legislador también señaló el comportamiento de Bolsonaro, que consideró atípico para un líder mundial. “Ni siquiera en una 'republiqueta', que no tiene absolutamente nada, el líder va sin barbijo y sigue diciendo ese tipo de cosas", apuntó Aziz. En cuanto a la negativa del presidente Bolsonaro a seguir con las recomendaciones mundiales sobre las medidas de aislamiento y el uso de mascarillas para evitar la propagación del virus, Aziz considera que están en relación directa con la apuesta del mandatario por una inmunidad colectiva.
Desde la CPI, siete de los 11 senadores que conforman la comisión afirman que la documentación y la información que han investigado hasta ahora confirman que Bolsonaro contó con un gabinete paralelo, que estuvo integrado por el entonces secretario de Comunicación Fábio Wajngarten, entre otros políticos afines, empresarios y personal médico.
Acualmente Brasil suma más de 462 mil muertes por covid-19, convirtiéndolo en el segundo país con mayor cantidad de fallecidos a causa del virus. La comisión fue instalada a fines de abril, desde entonces ha escuchado testimonios de las principales autoridades sanitarias del país, incluyendo a la serie de ministros de Salud que ocuparon el cargo desde que comenzó la pandemia. La CPI también investiga las compras de oxígeno y medicamentos para intubación, que aún escasean en algunas regiones del país, así como las noticias falsas sobre la pandemia y la falta de una campaña desde el gobierno para comunicar la gravedad del coronavirus.