Facebook anunció este viernes la suspensión por dos años de la cuenta del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, el máximo castigo posible y que durará hasta enero de 2023, tras acusarlo de violar las reglas de la red social por "alentar y legitimar la violencia" durante el asalto al Capitolio el 6 de enero pasado.
Desde la empresa explicaron que "esta penalización solo se aplica a sus servicios" y que "Trump es y seguirá siendo libre de expresarse públicamente por otros medios". "Nuestro enfoque refleja la forma en que intentamos equilibrar los valores de la libertad de expresión y la seguridad en nuestros servicios para todos los usuarios", detallaron.
"Dada la gravedad de las circunstancias que llevaron a la suspensión del señor Trump, creemos que sus acciones constituyeron una grave violación de nuestras reglas que merecen la pena más alta disponible bajo los nuevos protocolos", afirmó el vicepresidente de asuntos globales de la firma, Nick Clegg, en un posteo.
La empresa de Mark Zuckerberg también señaló que los políticos serán tratados como otros usuarios cuando violen las reglas de la red social, en particular en caso de desinformación, al tiempo que presentó un sistema de "penas" para castigar el comportamiento de figuras públicas en periodos de violencia o disturbios.
Las penalizaciones van desde un mes de suspensión a dos años sin acceso a las redes sociales del grupo, y serán evaluadas por expertos. "Sabemos que cualquier sanción que apliquemos o decidamos no aplicar será controvertida", reconoció la empresa.
Sin pérdida de tiempo, Trump reaccionó calificando el veto de un "insulto" a sus votantes y aprovechó para insistir en que le habían robado las elecciones presidenciales de 2020.
"La decisión de Facebook es un insulto a un número récord de 75 millones de personas, además de muchos otros, que votaron por nosotros en las elecciones presidenciales amañadas de 2020", expresó Trump en un comunicado.
Y agregó: "No se les debería permitir que se salgan con la suya con esta censura y silenciamiento. Al final, ganaremos. ¡Nuestro país no puede soportar más este abuso!".
El mes pasado, el Consejo Asesor de Contenidos, un cuerpo formado por investigadores independientes y creado por la compañía de Zuckerberg, instó a vetar al mandatario de Facebook e Instagram.
La resolución, que fue vinculante, indicó que "existe evidencia suficiente" para prohibir el acceso del magnate a esas redes sociales, pero no para que esa medida sea permanente.
El panel también dispuso que Facebook revisara "su contribución a la narrativa del fraude electoral y las tensiones políticas" que llevaron a la violencia en el Congreso que dejó cinco muertos cuando estaba en marcha la sesión para certificar la victoria electoral de Joe Biden.
Durante ese asalto, el magnate publicó en sus redes sociales un video en el que le pidió a sus simpatizantes que se vayan a sus casas, pero con en un mensaje ambivalente también les dijo: "Los amamos, son muy especiales".
Ese posteo fue borrado por Facebook, argumentando que violaba sus reglas, por lo que el republicano insistió con un texto en el que justificó la violencia ante "una victoria electoral aplastante despojada de manera tan brutal", que también fue luego eliminado.
La empresa suspendió por 24 horas sus cuentas y, a casi dos semanas de dejar la Casa Blanca, la prohibición pasó a ser por tiempo indefinido, lo que fue justificado así por Zuckerberg: "Creemos que los riesgos de permitir que el Presidente continúe usando nuestro servicio durante este período son simplemente demasiado grandes".
Previo a llegar a la Casa Blanca, Facebook se negó a bajar varios videos controvertidos de Trump, como el que subió en 2015 el entonces candidato republicano pidiendo prohibir el ingreso de musulmanes a Estados Unidos, medida con la que después avanzó al llegar al poder.
El año pasado, al exmandatario se le permitió publicar constantemente información falsa sobre el coronavirus e incluso, tras los disturbios por el asesinato del afroestadounidense George Floyd por parte de un policía en Minneapolis, posteó: "Cuando empiezan los saqueos, empiezan los disparos".
Otras redes sociales como Twitter, la favorita de Trump, además de plataformas como Twitch y aplicaciones como Google Play, entre otras, prohibieron o restringieron la difusión de mensajes del magnate a partir de sus últimos días de Gobierno bajo el argumento de "incitación a la violencia".