La estadística insinuó en las últimas horas un atisbo de alivio en la crisis sanitaria que golpea duro. Las autoridades marcaron ayer el quinto día consecutivo de descenso en cuanto a número de contagios covid reportados en Rosario. Nadie se anima a afirmar que haya pasado el pico de la segunda ola, pero se aguarda que esta tendencia continúe y así permita descomprimir la demanda que sufre el sistema de salud. Y esto coincide con otras dos buenas novedades: la mayor celeridad que parece cobrar la provisión de vacunas, y el inicio de los vacunatorios en los barrios (ver aparte). La ministra Sonia Martorano valoró ayer que desde el miércoles pasado los contagios vengan en descenso, pero aseguró no obstante que "por los próximos 15 días" el sistema seguirá saturado en su capacidad de internación para pacientes críticos.

Desde los 1151 contagios que se reportaron el miércoles pasado, esa cuenta ha venido en baja día tras día, hasta los 454 contagios informados anoche. Ello no significa que la pandemia esté en retirada en Rosario, ni mucho menos. Pero el intendente Pablo Javkin señaló ayer que "los números de hoy reflejan un ritmo de hace 10 o 15 días atrás. Esperemos que con estas semanas de restricciones, que son molestas y dolorosas, pero necesarias, podamos empezar a ver un escenario mejor e ir abriendo la actividad".

El problema es que el resto de los números siguen siendo graves: hay 8775 casos activos en la ciudad, 99% de camas críticas ocupadas, y la incidencia de casos cada 100 mil habitantes es de 1233, cuando lo deseable sería menos de 150.

Con todo, en este escenario de mayor fluidez de dosis de vacunas y un refuerzo en la campaña por inocular a la población, el Gobierno apura el ritmo. “Vamos a estar en un promedio de 40 mil inoculaciones por día, cuando hasta acá había sido 38 mil el número más alto diario. Esto es posible porque llegaron más vacunas. Y nuestra decisión es que rápidamente estén en los brazos de cada santafesino. Para eso estamos ampliando la capacidad de los vacunatorios, porque además se anotó mucha gente en estas últimas horas”, reveló la titular de la cartera sanitaria.

Como botón de muestra de ese afán por apurar la vacunación, ayer se conoció que para los próximos días se asignaron más de 210 mil turnos entre la población inscripta. Con esto, las autoridades confían en avanzar fuerte este viernes con la vacunación de todas las personas de entre 18 y 59 años con comorbilidades, y concluir este grupo hacia fin de mes. En tanto, desde el sábado en adelante, proyectan comenzar a vacunar a las personas menores de 59 sin factores de riesgo. 

En otro orden, los agentes sanitarios empezaron a pedir certificado médico y declaración jurada para quienes acuden a vacunarse habiendo manifestado una comorbilidad. Es que hubo casos de personas que falsearon esa información con tal de vacunarse antes.