Patricio Leonel Reynoso, el principal sospechoso del femicidio de Pilar Riesco, la joven que murió al caer de un balcón en el barrio porteño de Nueva Pompeya en marzo de 2020, se entregó a la justicia tras más de dos meses de estar prófugo y quedó detenido. El pasado 13 de abril había sido ingresado en la lista de alertas rojas de Interpol.
Reynoso (32), por cuyo paradero se ofrecía una recompensa de un millón y medio de pesos, se presentó junto a un abogado en la sede de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad en Palermo, y quedó detenido a disposición de la jueza en lo Criminal y Correccional 51, Graciela Angulo, imputado por "homicidio calificado por el vínculo y por haber mediado violencia de género".
“Yo sé lo que hizo y se va a demostrar, aún queda un camino para recorrer. Yo sigo mal porque mi hija no va a volver a estar”, dijo la madre de Riesco, Adriana Chiaverano, en diálogo con C5N. "A mi hija la tiraron de un balcón el 15 de marzo de 2020. La justicia no me escuchó, no leyó la causa y liberó al asesino. A mí no me daba el alma para hacer nada", recordó.
Fue recién cuando pudo tomar "un poco de fuerzas", repasó la mujer, cuando acudió a los medios y se puso a estudiar la causa junto a unos abogados, “amigos de toda la vida”. “Me querían hacer creer que mi hija se había suicidado y no fue así, a mi hija la mataron”, aseguró.
El caso de Pilar Riesco
Pilar Riesco murió cerca de las 16.30 del domingo 15 de marzo de 2020, al caer del balcón del departamento "E" del cuarto piso de la calle Alagón 305, en Nueva Pompeya.
Según la pesquisa, Reynoso había regresado de bailar a las 8, se acostó a dormir y cuando se despertó comenzó una discusión prolongada con la joven. El imputado afirmó que Riesco empezó a increparlo, a gritarle, a decirle que no lo quería, tras lo cual, según su relato, le arrojó un portarretrato con una foto de ellos y se tiró por el balcón.
Sin embargo, para la fiscalía y la querella, Reynoso "le propinó golpes varios" que le causaron "múltiples" lesiones, lo que pone en duda el relato del imputado.
"La hipótesis del suicidio intentada por la defensa resulta un vano intento no solo para descartar la intervención del imputado en el homicidio, sino también para patologizar a la víctima y de este modo invisibilizar el contexto de violencia de género que rodeó el hecho y la relación, que culminó con este final trágico del que Pilar fue víctima mortal", dijo Mariela Labozzetta, a cargo de la UFEM, cuando comenzó a colaborar en la investigación.
El pasado 3 de abril, la jueza Nacional en lo Criminal y Correccional 51 que investiga el femicidio, Graciela Angulo de Quinn, determinó que el acusado Reynoso estaba formalmente prófugo y lo declaró en rebeldía. El cambio de situación para el imputado se produjo tras allanamientos infructuosos que policía porteña y bonaerense llevaron adelante para encontrarlo.