Un grupo de indígenas colombianos de la etnia misak intentó derribar hoy una estatua de Cristóbal Colón, ubicada en las cercanías del Aeropuerto El Dorado, en Bogotá. La acción fue parte de las marchas y protestas convocadas para esta miércoles por el Comité Nacional del Paro (CNP) tras el fracaso del diálogo con el gobierno del presidente Iván Duque.
"Un grupo de comunidades indígenas intentaron derribar la estatua de Cristóbal Colón en la Avenida el Dorado. La Policía debió intervenir para evitar que la tumbaran", informó la Secretaría de Gobierno de Bogotá sobre el incidente. Tras el intento fallido, la alcaldesa Claudia López invitó a la comunidad misak a dialogar. Lo hizo a través de Twitter.
Además, los misak también intentaron derribar una estatua de Isabel I la Católica, la reina que financió la expedición de Colón en 1492, y que está ubicada cerca de la del navegante que descubrió América. Los hechos se dieron en el marco de las movilizaciones convocadas en Bogotá a raíz de la crisis política desatada en el país el mes pasado.
Esta mañana hubo manifestaciones y bloqueos en varios puntos de la ciudad, lo que afectó el tránsito de colectivos del sistema de transporte masivo Transmilenio. Hay 49 estaciones fuera de servicio, según reportó esa compañía. Las manifestaciones limitaron la circulación de vehículos alrededor del aeropuerto de Bogotá, de acuerdo a lo informado por las autoridades. Están previstas 26 actividades de protesta en la ciudad.
La crisis en Colombia comenzó el 28 de abril por una reforma tributaria promovida por el Gobierno y que luego tuvo que retirar. Lejos de frenar las protestas, estas se profundizaron con reclamos generales contra las políticas del gobierno de Duque y la represión ejercida por las fuerzas de seguridad contra los manifestantes.
Las manifestaciones se mantienen a diario con jornadas más intensas que otras, luego de que el CNP, la organización más visible detrás de las protestas, interrumpiera días atrás negociaciones que llevaba adelante con el Gobierno.
El lunes llegó al país la misión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con el objeto de verificar la situación de los derechos humanos tras las protestas que llevan cerca de 40 días y causaron más de 60 muertos.