El secretario adjunto del Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Chubut, Carlos Gómez, puso en duda ayer que el martes próximo se pueda firmar un acuerdo de paz social entre empresas operadoras, sindicatos y gobierno, tal como se venía negociando. El dirigente gremial señalo que “ante el blanqueo de la baja de equipos de SP que anunció YPF (ver nota principal), la situación no es muy clara”. Ayer se desarrollaban en Buenos Aires negociaciones de las cuales participaba el mencionado sindicato y el que agrupa a los empleados jerárquicos, con directivos petroleros para poder dar una respuesta que garantice los puestos de trabajo. “Se trabaja para sostener 1800 puestos de trabajo que hoy están sobrantes”, definió Gómez, que además es diputado provincial.

 Sindicatos y empresas, acompañados por el gobierno provincial que encabeza Mario Das Neves, buscan lograr un equilibrio que les permita firmar un acuerdo de paz social al menos por 180 días, en los cuales se asegure que no habrá despidos. Ese acuerdo implicaría un compromiso de inversión de cada empresa operadora, que al menos postergue los efectos más perniciosos de una crisis que tiene al borde del abismo a toda Patagonia Sur (cuenca San Jorge). La búsqueda del acuerdo se vio impulsada, además, por la situación de emergencia que aún vive parte de la provincia -con Comodoro Rivadavia como epicentro-tras el temporal que afectó viviendas y bienes de numerosas familias. Sin embargo, desde hace 15 días por lo menos se viene anunciando el acuerdo para los días siguientes, y no se concreta. Con una situación sectorial que, para peor, se va agravando.

“En las negociaciones vamos a tratar de sostener hasta fin de año la misma cantidad de equipos que hoy movilizamos en PAE e YPF. Tecpetrol estaría reactivando un equipo perforador y Sipetrol otro equipo más”, describió Gómez con respecto a las expectativas en las negociaciones que se desarrollaban en la ciudad de Buenos Aires. “Hoy (por ayer) se está discutiendo algún artículo del convenio que pueda ser flexibilizado, para cerrar los compromisos que se asumieron con Nación y las operadoras para sostener 1800 puestos de trabajadores que están sobrantes en bases y en yacimientos. Y tratar de que este semestre pueda desarrollarse en un marco de paz social y posibilitar la reconstrucción total de Comodoro”, anunció el dirigente sindical y diputado provincial. La flexibilización de los contratos laborales es la moneda de cambio que exigen las empresas petroleras para acceder al acuerdo.