La corrida desaforada de Gabriel Batistuta, con su melena al viento y la boca llena de gol tras batir a Jorge Campos es uno de los recuerdos imborrables que persisten a 28 años de la última obtención de la Copa América por parte de la Selección Argentina.
El goleador de Reconquista, Santa Fe, se despachó con dos goles ante el combinado azteca, en aquel histórico triunfo consumado el 4 de julio de 1993 en el Estadio Monumental Isidro Romero Carbo, en Guayaquil, ante 40 mil espectadores. Fue victoria 2 a 1 para el conjunto dirigido por Alfio Basile, que hasta esa final sólo había logrado ganar en los 90 minutos ante Bolivia, en el partido inicial, con otro tanto de Batistuta.
En el camino hacia la última vuelta olímpica de la Selección, el equipo había sumado dos empates en el Grupo “C”: 1-1 ante México, con gol del capitán Oscar Ruggeri, y 1-1 ante Colombia, con anotación de Diego Simeone. Por entonces el “Cholo” cumplía una función más ofensiva y lucía la mítica camiseta número 10. Esas dos paridades más el triunfo en la presentación le aseguraron su pase a la siguiente ronda.
En cuartos de final y en semifinales el triunfo llegó desde los doce pasos, gracias a la pericia de los ejecutantes y a la magia de Sergio Goycochea. Leo Rodríguez, el armador del equipo en varios pasajes de la Copa, aquel que cumplía las veces de enganche en el 4-3-1-2 que mostraba el conjunto Albiceleste, empató el partido ante Brasil con un cabezazo a la salida de un corner.
Después fue el turno del héroe de Italia 90, quien volvió a hacer de las suyas en los penales ante el eterno rival. Goycochea, quien sería elegido el mejor jugador del torneo, le detuvo el disparo a Marco Antônio Boiadeiro, en la serie de uno, cuando los primeros diez tiros se habían convertido. Contra los cafeteros la historia se repitió. Estuvo cerca de atajárselo al “Pibe” Valderrama en el quinto, pero finalmente hizo lo propio ante Víctor Hugo Aristizábal en el sexto disparo.
Otras imágenes que se mantienen de aquel certamen en el que por primera vez participaron dos selecciones de la CONCACAF (Estados Unidos y el propio México), son los penales decisivos de Jorge “Cacho” Borelli a Brasil y Colombia, la presencia de Fernando Redondo, las pinceladas del Turco García y los aportes de Fabián Basualdo y Ricardo Altamirano en los laterales.
Cabe recordar que la coronación conseguida en Ecuador 1993 significó un bicampeonato. Porque el elenco comandado por el “Coco” Basile también se había adueñado de la Copa América Chile 1991. A pesar de que la historia se tornó esquiva tras la conquista 14ª del certamen continental, Argentina ocupa el segundo lugar entre los países que más veces ganaron la competencia más antigua de selecciones de fútbol del mundo.
Desde su primera edición oficial en 1916, como parte de la conmemoración del centenario de la independencia de Argentina, Uruguay se ha convertido en su máximo exponente con 15 títulos y el podio lo completa Brasil, pentacampeón mundial, con sólo 9 copas ganadas.