India reportó este jueves más de 6.000 muertes por coronavirus tras hacer una revisión de las cifras de un estado del noreste del país. Los contagios experimentaron una ligera suba pero siguieron por debajo de los 100.000 por tercer día consecutivo.
Según cifras del Ministerio indio de Salud, 6.148 personas fallecieron en las últimas 24 horas, lo que eleva el total a cerca de 360.000, el tercero más alto del mundo. Sin embargo, en la jornada anterior, el país había registrado 2.219 muertos y 92.596 infecciones en 24 horas. La cifra casi triplicada de muertos de un día para el otro se debe a que el estado de Bihar revisó sus datos a pedido de un tribunal y detectó 4.000 decesos suplementarios.
El secretario adjunto de Salud del estado, Pratyaya Amrit, afirmó que estas muertes proceden sobre todo de hospitales privados o personas en aislamiento en sus propias casas y "no habían sido contadas hasta ahora", informó el periódico local Hindustan Times.
La justicia del Estado de Bihar había exigido una auditoría de los registros tras acusaciones según las cuales el Gobierno escondía la magnitud de la crisis al minimizar los casos de coronavirus y los fallecimientos.
Se sospecha asimismo que los Gobiernos de otros Estados también intentaron minimizar sus recuentos durante la segunda ola epidémica que golpeó India a fines de marzo hasta alcanzar un máximo de 400.000 contagios y más de 4.500 muertos diarios en el mes de mayo.
Como los registros están mal llevados en tiempos normales, muchos expertos consideran que el número de fallecimientos en India podría ser muy superior, hasta más de un millón de muertos, es decir el balance más alto del mundo.
Estas sospechas quedan reforzadas por el hecho de que la tasa de mortalidad en otros países, como Brasil y Estados Unidos, es varias veces superior a la de India.