Con el objetivo de reducir la brecha digital en Argentina y promover el derecho a la educación, el gobierno nacional relanzó el Plan Federal Juana Manso. Se trata de un programa que apunta a contribuir con la formación docente, la profundización del manejo de herramientas tecnológicas, y el acceso a aulas virtuales cerradas para la interacción con los alumnos.
"Es una plataforma que tiene un repositorio federal de contenidos para trabajar en las aulas en el marco de la presencialidad y la no presencialidad", explicó el ministro de Educación, Nicolás Trotta, durante el acto de lanzamiento del Plan. En la sede de la cartera educativa, donde funciona el portal Educ.ar, Trotta presentó la actualización de esta herramienta que no consume datos del celular y está adecuada a los tiempos de la pandemia de coronavirus que obligó a suspender la presencialidad en las escuelas.
El portal ofrece a los docentes instrumentos para desarrollar las clases de forma virtual en cualquier lugar del país. Le da la posibilidad y el sostén informático y tecnológico a los educadores para mantener la relación pedagógica con sus alumnos a través de aulas virtuales cerradas. "Son aulas seguras para cuidar a los chicos del grooming", destacó el funcionario aludiendo al acoso de adultos hacia los chicos a través de las computadoras. Solo el docente a cargo y sus estudiantes pueden acceder a aula, a menos que el docente cree un usuario especial para algún invitado ocasional, como el caso de Trotta que participó brevemente de una clase virtual en una escuela neuquina.
Además de las aulas virtuales y el espacio de formación docente, el Plan Federal Juana Manso cuenta con un repositorio federal compuesto por recursos educativos abiertos y una biblioteca digital. "Es absolutamente federal y horizontal, no nacional", señaló el ministro al explicar la forma de organización en la que fue pensado el proyecto. En el portal los docentes cuentan con algunos materiales que pueden reforzar sus clases, que no son de uso obligatorio, sino de apoyo para dinamizar las clases. Los maestros cargan sus propios materiales en el repositorio para los alumnos y el material queda archivado para que pueda ser compartido o utilizado por otros docentes de cualquiera de las provincias. "Se convoca a las jurisdicciones a la cocreación de contenidos. No es un programa terminado ofrecido a las provincias, sino una infraestructura para integrar colaborativamente producciones de todas las jurisdicciones", según se indica el portal.
La biblioteca pone a disposición de los alumnos una variedad de libros que pueden solicitar y que son prestados por quince días. El portal es utilizado por siete provincias. Los contenidos de la plataforma están alojados en los servidores de ARSAT, por lo que no consumen datos del celular. Haciendo foco en los alumnos que no cuentan con una conexió a internet, se logró un acuerdo con empresas de telefonía celular para que las videollamadas dentro del portal sean gratuitas y se facilite el acceso a la educación. "Tenemos el desafío de conectar a la mayor cantidad de escuelas, garantizar una mejor conectividad y democratizar la educación para todos", aseguró el ministro.
El programa Juana Manso se complementa con la distribución de netbooks para estudiantes y docentes con el fin de achicar la brecha digital. La entrega de computadoras había sido suspendida por la administración de Mauricio Macri, que desarmó el Plan Conectar Igualdad, a poco de asumir su mandato en 2015. Uno de los objetivo que se propuso el presidente Alberto Fernández fue achicar la brecha digital que la pandemia desnudó con mayor crudeza ante la imposibilidad de implementar las clases presenciales y el uso de la virtualidad. A partir de julio se comenzarán a repartir las cerca de setecientas mil netbooks que el ministro acordó con ocho empresas que fabrican computadoras para que provean al Estado.