Ricardo Buryaile adelantó hoy que el gobierno nacional está dispuesto a colaborar en la situación de la lechera SanCor, pero fue claro en la contraprestación. "No estamos pidiendo que echen gente, ni que bajen salario sino que se baje un aporte que hace el sector empresario, que está en condiciones dificilísimas, que va al sindicato", afirmó el ministro de Agroindustria.
En una entrevista radial, estimó que para el gobierno de Mauricio Macri es “una prioridad” solucionar los problemas económicos de SanCor, pero condicionó el otorgamiento de un crédito de 450 millones de pesos a la baja en los aportes sindicales. "Poner recursos en una empresa, sabiendo que no estamos resolviendo las cuestiones de fondo de la industria, nos estaría llevando a cometer los mismos errores del pasado", consideró.
El ministro abundó al reconocer que "estamos pidiendo sentarnos a hablar del Convenio Colectivo de Trabajo" por lo que la intención del gobierno es avanzar mucho más allá del aporte sindical. Pero por si acaso, le agregó que el pedido del Gobierno "está mucho más relacionado con la racionalidad que con preservar lo que tienen algunos sindicatos, que son los privilegios", justificó el ministro.
SanCor arrastra deudas por unos 300 millones de dólares y se cortó la cadena de pagos. Los trabajadores acamparon durante 40 días en reclamo de sus haberes y ayer llegaron a cortar la ruta 34. Durante la mañana de este sábado el corte se levantó cuando se confirmó que recibieron un pago de ocho mil pesos a cuenta de los salarios adeudados.
Mientras tanto, desde la cartera de Trabajo, Jorge Triaca dijo que “es una prioridad” para el gobierno macrista “sanear” las finanzas de la empresa. También dijo que las “soluciones” a analizar "requieren de cierta sustentabilidad" porque, si no, se estaría "poniendo recursos en algo que después no se va a poder sostener".