En un acto que se realizó en la Casa de Gobierno, el gobernador Gustavo Sáenz anunció importantes obras de infraestructura vial en la provincia con una inversión total de $7.789 millones. De ésos, $4.530 son fondos provinciales y $3.250 millones provienen de la Nación.
Muchas de las obras ya habían sido anunciadas, como acostumbra esta gestión, cuando se solicitaron a la Nación y cuando se firmaron los convenios marco, como sucedió con los dos tramos de la ruta nacional 40 que hoy entrarán en la etapa de licitación cuando se publique la convocatoria.
En esa pintoresca ruta que atraviesa el país de norte a sur, y que en la zona de los Valles Calchaquíes es considerada una travesía escénica, se pavimentarán dos tramos ansiosamente esperados por sus habitantes, pero la obra también fomentará el turismo, la producción y la comercialización.
Se pavimentará el tramo que une Molinos con Seclantás, de unos 18 kilómetros, y otro de 15 kilómetros que conecta los pueblos de Payogasta y Palermo. Desde Vialidad Nacional se habían publicado los valores de esas obras, que tendrían un presupuesto de $1.500 millones: $578 millones para los 15 kilómetros de Payogasta a Palermo, y $996 millones para Molinos-Seclantás. Se calcula que una vez licitadas, el tiempo de ejecución sea de 18 meses.
El mandatario provincial dijo sentirse orgulloso de anunciar el inicio de una obra tan esperada por sus pueblos como la de la pavimentación de los 32 kilómetros de la ruta provincial 86 que une a Tonono con Tartagal, en el departamento San Martín. Esa obra también recibirá aportes de Nación por $237 millones y generará más de 80 puestos de trabajo. Tiene un plazo de ejecución de 6 meses.
Se repavimentará la ruta provincial 23, entre Cerrillos y Rosario de Lerma. En este caso, no solo es una necesidad para la población local, sino que por allí transitan además cientos de camiones que se dedican a la producción local. El tramo interno que une a las dos localidades del Valle de Lerma es de 11 kilómetros, y es una vía imprescindible para la conexión del área metropolitana. El ministro de Infraestructura, Sergio Camacho, había adelantado a este medio que además se preveía iluminar todo el trayecto y hacer un nuevo alcantarillado que disminuirá las inundaciones en época estival.
Por último, se comunicó la publicación de la licitación de la pavimentación de 12 kilómetros de la ruta provincial 35, desde La Candelaria hasta el empalme con la ruta nacional 9, en el sur de la provincia. Una conexión necesaria para quienes allí habitan y los productores.
“Son obras en el corazón del Valle Calchaquí, el Valle de Lerma, el acceso al Chaco profundo con la ruta 86, y el pavimento de acceso a La Candelaria, en el sur provincial, más los dos puentes que faltan para el acceso a Los Toldos y la rotonda en el colegio San Pablo”, detalló el ministro de Infraestructura.
Circunvalación Noroeste
El mismo Camacho, fue el encargado de adelantar que la semana próxima se abrirá la licitación para realizar la circunvalación Noroeste que incluye un túnel que pase por debajo de la actual rotonda ubicada frente al colegio San Pablo, y que une el templete de San Cayetano hasta el puente de San Lorenzo.
En el mismo proyecto se realizará el tramo noroeste de la Circunvalación, y de esa manera terminar de unir la avenida Bolivia con la Circunvalación Oeste a la altura de la rotonda antes mencionada, sobre la ruta provincial 28 y atravesando el campo militar.
“Esta obra permitirá la descongestión vehicular que se produce en los horarios pico, teniendo en cuenta que en la Rotonda San Pablo pasan unos 31.000 vehículos por día”, explicó Camacho. La intención del gobierno es que sea con inversión privada y a pagar por la provincia de acuerdo a lo que se fije en los pliegos y condiciones y a las propuestas recibidas. Se estima que tendrá un costo de unos $4.000 millones, con un plazo de ejecución de 2 años.
En el marco de los homenajes por los 200 años del paso a la inmortalidad del General Güemes, Sáenz expresó que tiene “la gran responsabilidad de seguir con el legado del padre de los pobres: pelear por una Patria más federal y devolver a cada uno de los pueblos lo que se merecen”. Y añadió que no quiere más pueblos aislados, “especialmente en épocas de lluvia”.
El ministro de Economía, Roberto Dib Ashur, subrayó que las obras tendrán un impacto directo no solo en la generación de mano de obra sino también en los distintos sectores productivos.
Puentes para unir a Los Toldos
En el mismo acto se rubricaron los convenios entre el secretario de Obras Públicas, Hugo de la Fuente, y los intendentes de Los Toldos, Virgilio Mendoza, y de Santa Victoria Oeste, Víctor Quispe, para la construcción de dos puentes sobre los ríos Candado y San José en la ruta provincial 7, que une ambos pueblos por Argentina sin la necesidad de tener que salir por Bolivia.
En diálogo con Salta/12, Quispe agradeció al gobernador por la decisión de invertir en los municipios más lejanos. Aseguró que el anuncio es “una alegría para los vecinos, porque vamos a estar conectados a través de esta ruta nueva”.
A pesar de reconocer que ese trayecto de unos 75 kilómetros que se reabrió en julio del año pasado en el marco de la pandemia de coronavirus y como una salida a los problemas que se presentaban a los toldeños para ingresar al país, aún es muy precario, consideró que de a poco se irá mejorando y consolidando, “ese es el compromiso que asumimos los dos intendentes y el gobierno provincial”, manifestó.
Pero acentuó que los dos puentes, que serán de cemento, son imprescindibles en ese camino debido a que esos ríos “traen bastante agua, y en época de lluvia es imposible pasarlos”. Y celebró la decisión del gobierno provincial de darles la ejecución de la obra a los mismos municipios.
En el caso de Santa Victoria, recibirá $14 millones y ocupará mucha mano de obra local, por lo que ese dinero “vuelve a quedar en el pueblo”, sostuvo Quispe. Según el mandatario comunal, el municipio cuenta con todas las herramientas necesarias, por lo que los trabajos comenzarían en un par de semanas.
Municipios rescatados
Como el año pasado, el gobierno provincial debió salir al rescate de casi la mitad de los municipios, que a la hora de hacer cuentas informaron que sin la ayuda de anticipos coparticipables no podrían afrontar el pago de aguinaldos del próximo mes.
Son 25 los municipios, entre ellos Vaqueros y La Caldera, que solicitaron la semana pasada un salvataje económico para hacer frente a sus responsabilidades con sus empleados argumentando que la crisis económica, la inflación, y la situación sanitaria provocada por la pandemia, agotaron sus arcas.
El presidente del Foro de Intendentes, Daniel Moreno, es uno de los que pidió la ayuda estatal para su municipio, Vaqueros, y la argumentó entre otras cosas que "la pandemia nos demandó mucho dinero para contenerla y no es barato”. El jefe comunal contó que debieron destinar muchos recursos a colaborar con el área de salud comprando insumos y elementos de protección, y en su caso destinó una médica para “que se contacte con los pacientes y hubo que comprarle todos los accesorios para que pueda movilizarse hasta sus domicilios”.
Asimismo, relató cómo al día de hoy se sigue ayudando a muchas familias aisladas o que tienen problemas económicos que surgieron por las restricciones y las cuarentenas.
El salvataje provincial consiste de una transferencia que se realizó en ayer por el monto total de lo que cada municipio debe pagar a sus empleados en concepto del aguinaldo venidero. Este ayuda se descontará de la coparticipación en seis cuotas consecutivas.
Moreno reconoció que a pesar de la urgencia, este año se mejoraron los números de la coparticipación debido a que se reactivó la economía tanto del país como de la provincia. Pero no fue así con las recaudaciones municipales, “la gente prefiere pagar la luz, el gas, los servicios, comer y después, si sobra algo, pagar los impuestos municipales, esa es la realidad”.