La Cámara Federal porteña suspendió la audiencia que estaba prevista para este jueves para analizar los 38 procesamientos que dictó el juez Juan Pablo Augé en la megacausa de espionaje macrista que tramitó en Lomas de Zamora y se mudó en abril a los tribunales de Comodoro Py. La definición vendrá después de que ese tribunal resuelva una batería de recusaciones que presentaron tanto querellantes como defensores.
La revisión de la causa quedó en manos de la Sala II de la Cámara Federal, pero con una integración especial, ya que ni Martín Irurzun ni Roberto Boico intervienen. El único integrante original de la Sala que quedó para entender en el caso es Eduardo Farah, a quien el exdirector general de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Gustavo Arribas recusó por haber declarado como testigo en la causa de la llamada "mesa judicial" del macrismo, en la que relató las presiones por las que terminó pidiendo su traslado a un tribunal penal económico primero y a un tribunal oral de San Martín después. Arribas es uno de los funcionarios señalados como participantes de la mesa judicial por la serie de correos que aparecieron en su viejo despacho con convocatorias a las reuniones de los asesores judiciales de Mauricio Macri.
A los otros dos integrantes de la Cámara, Mariano Llorens y Pablo Bertuzzi, los recusaron los abogados Rafael Resnick Brenner y Jorge Chueco, mientras que Alejandro Rúa pidió que aparten a Bertuzzi. El tribunal deberá resolver --si puede-- las recusaciones cruzadas y volver a convocar a una audiencia, que la defensa del exagente de la AFI Martín Terra reclamó que sea oral y pública.
La Cámara tiene que examinar la situación de los jerarcas de la AFI, de los directivos de Jurídicos de ese organismo, de los espías conocidos como los Súper Mario Bros y de los jefes del Servicio Penitenciario Federal. También deben decidir si confirman el procesamiento de la excoordinadora de Documentación Presidencial Susana Martinengo y si convalidan la falta de mérito del secretario privado de Macri, Darío Nieto.
