Desde mayo pasado, con una audiencia por semana, ante el Tribunal Oral Federal 2 de Salta se está llevando a cabo un juicio contra el ex jefe barrabrava Daniel “Rengo” Aguilera y su ex pareja, Belinda Ríos, por "transporte de estupefacientes".
El Tribunal, integrado por la jueza Gabriela Catalano y los jueces Domingo Batule y Abel Fleming, prevé que hoy cerrará con la etapa de testimoniales. El 1° de julio comenzarían los alegatos respecto a la responsabilidad penal.
El fiscal federal del Área de Casos Complejos de la Unidad Fiscal Salta, Ricardo Toranzos, a cargo de la acusación desde el inicio de esta causa, recordó al comienzo del debate que este caso se originó en un control de Gendarmería Nacional realizado el 25 de julio de 2020 en el puesto de Cabeza de Buey, 55 kilómetros al sur de la ciudad de Salta, sobre la ruta nacional 34.
Al revisar 17 encomiendas transportadas por la firma Vía Cargo, se detectó que uno de los paquetes llevaba 5,4 kilos de cocaína. A partir de allí, se siguió el procedimiento de entrega vigilada para dar con los responsables de la maniobra. Este procedimiento está previsto en el sistema acusatorio, que se aplica en Salta y Jujuy desde el 10 de junio de 2019.
Así la encomienda llegó a un local de la transportista en la ciudad de Mendoza, donde fue retirada por Belinda Ríos, quien fue la primera en ser detenida. Ríos alegó entonces que el paquete era de su ex pareja, Daniel Aguilera, y que debía entregarlo en una vivienda del departamento mendocino de Godoy Cruz.
Con esos datos se realizaron distintos allanamientos. En uno de esos procedimientos fue detenida Emilce Quiroga, la persona que iba a recibir la droga. También hubo un procedimiento en el Complejo Penitenciario Federal de Mendoza, donde estaba detenido Aguilera, que desde el 30 de julio de 2020 cumple una condena de 12 años de prisión en otra causa por narcotráfico. En la inspección en la celda 33, que ocupaba, se secuestraron un teléfono celular y anotaciones. Estos elementos fueron sumados como parte de la prueba.
En el alegato de apertura, el fiscal advirtió que las pruebas documentales y testimoniales demostrarán que Aguilera tuvo el dominio de la droga en todo momento y es el responsable principal del transporte iniciado con el despacho de la encomienda con cocaína desde la localidad de Salvador Mazza, ubicada en la frontera con Bolivia.
Por otro lado, el fiscal dijo que Ríos no sólo implicó a su ex pareja, sino que también reveló que su participación se debió a las amenazas que recibió de parte de Aguilera, reconocido ex jefe de la barrabrava del Club Deportivo Godoy Cruz Antonio Tomba, de Mendoza.
Hasta ahora los testigos que declararon en el debate, todos miembros de fuerzas de seguridad, se refirieron a las distintas etapas de la investigación y a las expresiones de Ríos y Quiroga.
Esta última mujer había reconocido al momento del allanamiento en su casa que efectivamente esperaba la encomienda que retiró la ex pareja de Aguilera.
En la sentencia que condenó a Aguilera a 12 años de prisión, fue hallado culpable de dirigir una organización dedicada a la distribución de drogas en Mendoza, aunque en 2013 y 2017 recibió otras sentencias condenatorias por delitos contra las personas y por violencia de género.
En la investigación realizada por la Justicia federal de Salta se determinó que Aguilera coordinó y llevó adelante la operación desbaratada el año pasado mientras era juzgado por dirigir la venta de estupefacientes desde la cárcel, donde logró poner en marcha una red de operadores que cumplían sus instrucciones.