La Copa América de Brasil 2021 ingresó a su etapa de definiciones y varios equipos se juegan buena parte de su futuro. Este es el caso de Ecuador y Perú, que igualaron 2-2 en el Estadio Olímpico de Goiania. El árbitro fue el español Jesús Gil Manzano.

En los primeros 20 minutos de partido no pasó de la mediocridad. Ambos conjuntos evidenciaron sus carencias ofensivas y su falta de creatividad por lo que los arqueros fueron espectadores de lujo hasta ese momento, sin embargo Ecuador parecía algo mejor plantado en el terreno de juego.

El cero se rompió a los 23 minutos cuando Estupiñán pudo soltarse por izquierda y lanzó un buscapié perfecto al centro del área que Renato Tapia, en su intento por rechazar, terminó metiendo en su propio arco. A partir de Allí, con la ventaja en el marcador, el equipo de Gustavo Alfaro comenzó a justificar la victoria parcial ante un combinado incaico que quedó golpeado por el tanto.

Ecuador fue creciendo y generó un puñado de oportunidades de cara al arco de Pedro Gallese, quien tuvo bastante trabajo, pero no pudo evitar el segundo tanto. Casi sobre el final, llegó la ampliación del tanteador ante un centro de Damián Díaz en un tiro libre desde la derecha que Ayrton Preciado terminó convirtiéndolo en gol al llevarse la pelota por delante casi sin intención. 

En el complemento se despertó Perú. Por fin aparecieron destellos del seleccionado que fue finalista de la Copa América pasada y que llegó al Mundial de Rusia 2018. Con buenas asociaciones de ataque y juego ofensivo, el cuadro incaico descontó rápidamente en una maniobra colectiva de Carrillo y Cuevas que terminó con una asistencia de este para que Lapadula reciba en el área y defina con un disparo cruzado para el 1-2, a los tres minutos de juego.

Los de la banda ganaron confianza, acorralaron a Ecuador y antes de los diez minutos gritaron el empate. Fue en un contragolpe que inició un gran pase de Peña por izquierda que habilitó la corrida de Lapadula. El delantero dejó en el camino a Arboleda, que trastabilló en su intento por detener al rival, y con la cara externa del pie derecho asistió a Carrillo, quien había corrido por la punta izquierda y llegó libre para empujar la pelota al gol.

El resto del encuentro se jugó con más ímpetu y ganas que buen fútbol pero el desorden hizo aparecer los espacios. Es que Ecuador salió con todo a ganarlo, entendiendo que sino el panorama era adverso de cara al objetivo de clasificar. Si bien ambos equipos tuvieron oportunidades, ninguno pudo quebrar y el duelo terminó 2-2.