La expansión de la variante delta de la covid-19 obligó a varios países a aplicar nuevas restricciones, según especialistas y autoridades sanitarias si no se toman medidas de prevención la cepa podría provocar una nueva ola en todo el mundo. Desde este viernes Israel volvió a imponer el uso de mascarilla en lugares públicos cerrados. Mientras que Australia confinó barrios en el área metropolitana de Sidney.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) la pandemia de coronavirus se está desacelerando: los números de casos nuevos son los más bajos desde febrero, y el número de muertos también se redujo. Sin embargo, la variante delta identificada por primera vez en India tiene en alerta a países como Portugal, Indonesia, Rusia, España, Reino Unido, Alemania. La cepa empezó a propagarse en abril y está presente en al menos 85 países, aunque con porcentajes dispares, según la OMS.
Variante Delta
En Europa, la variante Delta se extendió rápidamente en el Reino Unido, específicamente en Inglaterra, donde actualmente fue detectada en el 95 por ciento de los tests realizados, según datos de Public Health England. Esta tendencia podría extenderse al resto de Europa según el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) que estima que la variante representará el 70 por ciento de las nuevas infecciones en la Unión Europea para principios de agosto y alcanzará el 90 por ciento a finales de ese mes.
Esto se explica porque la variante Delta es entre 40 – 60 por ciento más transmisible que la variante Alpha, una cepa más contagiosa que se expandió en Europa durante la primera ola de la pandemia. Esta semana el ECDC advirtió que "si se relajan las medidas no farmacéuticas durante este verano (boreal) (...), podría haber un aumento rápido y significativo del número de casos diarios en todos los grupos de edad". Según el organismo esto conduciría a un alza de las hospitalizaciones y muertes que podrían incluso alcanzar “los mismos niveles que durante el otoño (boreal) de 2020 si no se toma alguna medida suplementaria”.
Israel y Portugal
Las autoridades sanitarias israelíes habían relajado las medidas y desde el 15 de junio el uso de mascarilla dejó de ser obligatorio en interiores y exteriores. Sin embargo, ante la propagación de la variante Delta, este viernes Israel reestableció el uso obligatorio de mascarillas en espacios públicos cerrados. Esta semana las autoridades registraron más de 100 casos diarios nuevos del virus con un repunte de 227 casos el jueves.
Portugal también interrumpió la retirada progresiva de restricciones sanitarias debido a la expansión de la variante Delta. Las autoridades sanitarias incluso endurecieron las medidas en Lisboa. En vecino país ibérico, un viaje de estudiantes a las turísticas islas Baleares provocó un gran foco de contagios. Sólo en la región de Madrid 320 jóvenes dieron positivo y otros dos mil tuvieron que ser aislados, aunque según fuentes sanitarias regionales se trataría de la variante británica Alfa.
Australia
En Australia, donde se había logrado contener la propagación del virus, las autoridades ordenaron el cierre durante una semana de cuatro zonas en el área metropolitana de Sidney. Por su parte, la Asociación Médica Australiana pidió que las medidas se extiendan a toda la ciudad en lugar de limitarlo solo a algunos barrios. La medida fue adoptada luego de que esta semana se detectaran 65 casos positivos relacionados con un conductor de limusina contagiado cuando trasladó a la tripulación de un vuelo internacional del aeropuerto de Sidney a un hotel de cuarentena.
India y Rusia
En India, el estado de Maharashtra, donde la capital del estado es la metrópoli Bombay, también reforzó sus restricciones este viernes ante el temor de una tercera ola más fuerte. Mientras que Moscú, foco de la pandemia en Rusia, anunció que retomará el teletrabajo obligatorio para el 30 por ciento de los trabajadores de empresas. El país registró sus mayores cifras en seis meses y en medio de un fuerte brote atribuido a la Delta.
Alemania
Alemania, por su parte, introdujo restricciones estrictas para viajes desde Portugal y Rusia a raíz del repunte de casos de la variante delta. Desde el martes, sólo ciudadanos y residentes de Alemania pueden viajar desde y hacia Rusia y Portugal. Las aerolíneas y las operadoras de transporte terrestre no podrán transportar a otros pasajeros. Mientras que los ciudadanos y residentes que entren al país deberán guardar cuarentena por dos semanas, sin importar que cuente con un test negativo de covid-19. Actualmente Alemania tiene una lista de 14 países a los que considera de alto riesgo, entre ellos está Reino Unido, India, Sudáfrica y Brasil, donde la variante delta predomina en el número de casos. El jefe del Instituto Robert Koch aseguró se espera que la delta se convierte en la cepa dominante para el próximo otoño.
Italia
Italia, donde el 31 por ciento de la población mayor de 12 años completó el ciclo de vacunación, los especialistas expresaron su preocupación por la variante delta de la covid-19. Franco Locatelli, el coordinador del Comité Técnico Científico que asesora al Gobierno italiano en la lucha contra la pandemia señaló que aunque la presencia de la cepa Delta sea acotada “su difusión no se debe subestimar”. Locatelli planteó que recién el próximo lunes se sabrán los datos de la difusión de la nueva variante en el país.
Uganda
La OMS también alertó este viernes por el ascenso de contagios en África, donde 14 países, además, tienen serias falencias en sus programas de vacunación, con apenas el uno por ciento de su población inmunizada.La organización advirtió que el continente enfrenta un "rápido aumento" de casos en su tercera ola de coronavirus. En la República Democrática del Congo y en Uganda registraron un repunte de casos y en otros 12 países la variante Delta fue la predominante en el último mes.
Catorce de los 54 países africanos utilizaron más del 80 por ciento de vacunas a través del mecanismo Covax y ocho de ellos ya las agotaron. Pese a que fueron administradas alrededor de 2.700 millones de dosis en todo el mundo, apenas algo más del uno por ciento de la población africana ha sido vacunada en su totalidad. "Con las altas tasas de vacunación, se perfila un verano de libertad, familia y diversión para millones de personas en los países más ricos. Esto es comprensible y todos anhelamos las mismas alegrías. Pero la escasez de vacunas ya está prolongando el dolor en África. Los africanos no deben enfrentarse a más restricciones por no poder acceder a vacunas que solo están disponibles en otros lugares”, indicó Moeti.