Tras las elecciones legislativas en Jujuy, los números decantaron y el análisis político se impone ya que los resultados dan por ganador al Frente Cambia Jujuy, espacio liderado por el mismo gobernador Gerardo Morales, aunque también puede apreciarse que el piso del 5% de voluntades del padrón electoral para acceder a una banca, aunada a la baja participación de electores, generó como resultado una limitada representación política.
Por el lado del Peronismo jujeño, desde el regreso de la democracia, en estas elecciones provinciales 2021 obtuvo el peor porcentaje, apenas un 30.46% (con la sumatoria de las magras cosechas del peronismo dividido en varios frentes).
Jujuy ha sido tradicionalmente justicialista y en estas elecciones ese sector recibió un gran sacudón ya que como en 2019 la oposición jugó separada dejando los votos dispersos, sin lograr sumar para una sola fuerza, muchos votos se perdieron sin que los frentes separados pudieran alcanzar el piso del 5% necesario para conseguir un escaño. Muchos dirigentes provinciales y nacionales tienen responsabilidad en esta división, la lectura es amplia y deja al descubierto los intereses de la provincia y el poder político que suma Morales.
Según los datos del Tribunal Electoral de Jujuy, solo participó el 66,7% del total del padrón electoral jujeño. La caída de la asistencia de electores repercutió en el piso electoral, si bien fueron elecciones legislativas, en las que tradicionalmente no suelen concurrir muchos votantes como en comicios generales. Jujuy tradicionalmente tiene un alto porcentaje de participación, las elecciones de este año tienen el más bajo porcentaje de asistencia, quizás también provocada por de la pandemia, además del frío y la llovizna.
El total de electores habilitados para sufragar en las elecciones fue de 570.879 personas, lo hicieron 380.628 en un clima electoral y sanitario crítico.
Los votos afirmativos fueron 363.651; los votos en blanco, 16977; los votos nulos, 10480. Según los datos del Tribunal Electorl, 130.000 personas no fueron a votar, lo que representa un 35% del padrón.
En el mapa político de Jujuy volvió a imponerse el bipartidismo: la Unión Cívica Radical y el Partido Justicialista. Ambas fuerzas buscaron polarizar las elecciones, dejando fuera a las diferentes fuerzas opositoras, varias identificadas con el justicialismo y el kirchnerismo, que buscaron diferenciarse del PJ, al que calificaron como una oposición ficticia. Esas fuerzas alternativas no lograron permear el 5% del piso electoral, que representa 28.500 votos.
Teniendo en cuenta que en el escrutinio provisorio los votos válidos emitidos son 380.628 sobre un total de 570.879 electores, los números indican que con tan sólo obtener 200.529 sufragios una fuerza política alcanzaría los 24 diputados que se renovaban, es decir, las fuerzas políticas minoritarias no tienen representación política en el esquema electoral jujeño.
Según el escrutinio provisorio con el 98,39% de las mesas, el bloque oficialista obtiene 18 bancas. Ingresarían a la Cámara legislativa Omar Gutiérrez, Gabriela Burgos, Alberto Bernis, Ivana Bravo, Adolfo Tejerina, Cynthia Alvarado, Juan Brajcich, Alejandra Elías, José López, Malena Amerise, Luciano Angelini, Natalia Guevara, Néstro Sanabia, Analíoa Ruíz, Adriano Morone, Olga Ramos, Gustavo Arias y Mabel Batallanos.
En tanto que por el Frente de Todos –PJ ingresarían Pedro Belizán, Patricia Armella, Juan Jenefes, Valeria Gómez, Juan Ortega y Daniela Vélez.
Hoy se inicia el escrutinio definitivo que será refrendado por la Junta Electoral de la provincia.
De las 13 bancas que puso en juego, el oficialismo obtuvo 18, de manera que después del 10 de diciembre, Morales tendrá mayoría en la Cámara Legislativa, con 26 escaños de los 48. A eso se le suman las 4 bancas del Frente Primero Jujuy (pata peronista del oficialismo). Más una banca del unibloque (del diputado Marcelo Nasif) y las 3 bancas del Frente Juntos por Jujuy.
En tanto que el Frente de Todos-PJ, presidido por Rubén Rivarola, se queda con 6 bancas, sólo gano 2 más de las 4 que tenía en juego. Y su bloque estará integrado por 14 bancas a partir de diciembre. Es decir, dejando fuera al Frente de Izquierda y de los Trabajadores-Unidad que debía renovar 4 bancas; al Frente Primero Jujuy, que perdió las dos bancas en juego, y la diputada Alejandra Cejas (PJ), que participó desde el espacio Unidad para la Victoria pero no pudo retener su banca.
Ese esquema es el tablero de Morales y su proyección a nivel nacional y toda la posibilidad de presentar un proyecto de reforma de la Constitución provincial, que requiere ser actualizada, sí, pero también es más que probable que el gobernador apueste a una reelección, y además con ese número de legisladores el oficialismo podrá avanzar con sus proyectos.
Las elecciones dejaron varias heridas políticas en esta campaña express. La izquierda realizó una buena elección, pero no alcanzó el piso para ingresar legisladores. Este sector colectó el voto castigo del justicialismo y se impuso como tercera fuerza.
Por otro lado, realizó una muy buena elección en la categoría concejales en San Salvador de Jujuy, donde ingresa Gastón Remy, que debería finalizar su mandato de diputado provincial (por el acuerdo de rotación de banca) el 10 de diciembre, pero a la fecha no pudo acceder todavía a su banca.
Por los municipios
El Frente de Todos-PJ apostó con su nueva figura, Martín Llamas, como candidato a concejal en San Salvador de Jujuy, pero no logró el piso electoral, con lo que quedó fuera de la distribución de las bancas.
Repasando el escrutinio provisorio, de la oferta electoral que tuvieron los jujeños una de ellas fue el Frente Todos por Jujuy, que obtuvo un 6,51%, como una construcción política de raíz peronista, una alternativa en la oposición y muy identificado con el gobierno nacional. No superó el piso para acceder a una banca en la Legislatura provincial, pero sí obtuvo un muy buen resultado en Libertador General San Martín.
Allí, la dirigente y concejala Patricia Gutiérrez retuvo su banca y ganó una más, imponiéndose esta fuerza en una localidad teñida de banderas radicales. Gutiérrez fue una de las mujeres que encabezó la lista de candidatos.
Otro ganador fue el concejal Julio Moisés, también del Frente Todos por Jujuy, que retuvo su banca en la ciudad de San Pedro. Histórico dirigente del justicialismo y que en la campaña electoral fue víctima de la covid, tras recuperarse, siguió militando como lo hizo siempre.
Otra sorpresa electoral fue la de La Quiaca, donde el Frente de Todos-PJ sacó un 20% quedándose con las tres bancas, por encima del radicalismo, que apenas alcanzó el 5%. En 2019 este municipio recuperó las banderas peronistas y en estas elecciones ratificó ese andar.